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Trey Thompkins: El día que lo cambió todo

Su temporada ha sido una montaña rusa a escala baloncestística: llegó siendo uno de los fichajes estrella de la liga, sus primeros meses pincelaron dudas sobre su rendimiento, pero éste finalmente se impuesto a los ojos del escepticismo y ahora Trey Thompkins disfruta individualmente del éxito colectivo que supone alcanzar el Playof Final

 (ACB Photo / V. Salgado)
© (ACB Photo / V. Salgado)
  

Redacción, 14 Jun. 2016.- Como señalan las grandes narraciones deportivas, llegado el Playoff Final de la Liga Endesa, es el momento en el que se separan los niños de los hombres…, o, dicho de otra manera, cuando los referentes de cada equipo da un paso al frente.

Con esa vitola llegó en verano Trey Thompkins. Su etapa en Nizhny Novgorod mostró un virtuosismo ofensivo y polivalencia en la pista que le convirtió en objeto de deseo por media Europa. El Real Madrid fue el hábil pescador que cautivo con sus redes al pívot norteamericano y su comienzo de temporada parecía confirmar el acierto de su incorporación.

Su llegada a la Liga Endesa tuvo un notable impacto promediando 10 puntos y una valoración media de 14 en los cinco primeros partidos, pero a partir de entonces… poco o nada fue lo mismo.


El pívot cayó en una vorágine de malas actuaciones a las que se unieron problemas físicos conduciéndole a una complicada situación en la que incluso se llegó a ver fuera de las convocatorias de un Real Madrid que tampoco estaba en su mejor momento. Sin duda que fueron semanas adversas para un jugador que no parecía predestinado a vivirlas.

"Cada temporada tiene sus momentos de altibajos. Mi temporada comenzó quizá un poco por debajo de lo que yo esperaba", comenta un Thompkins que confiesa que, incluso en esos momentos siempre sintió el apoyo de compañeros y club. "La gente que estuvo detrás mío se mantuvo cada día apoyándome para que estuviera animado y finalmente he regresado a mi nivel, estoy dentro de la rotación del equipo y estoy aportando cosas para que el equipo gane".

Como si de un peaje que todos debemos pagar se tratase, Thompkins nos revela como unas palabras de su padre actuaron como idea en la que focalizar ánimos durante esos días. "Desde que era pequeño mi padre siempre me lo dijo "sólo los fuertes sobreviven" así que cada día hay que estar centrado y al final se consigue". Al margen de las dudas y los comentarios que suscitaron sus números, Thompkins siempre mostró una claridad de ideas y perseveró en el esfuerzo hasta recuperar el nivel de forma de comienzo de temporada. Como nos dice, "los malos tiempos no pueden hacer perder lo que tú eres".

"Tirar hacia adelante cada día", esa fue la consigna que grabó en su mente y, cuando su cuerpo recuperó sensaciones, Thompkins volvió a recuperar la entidad de jugador importante con la que llegó a Madrid.

(ACB Photo / V. Salgado)
© (ACB Photo / V. Salgado)

Y como todo cambio, éste viene marcado por un punto de inflexión o una fecha. Para Trey ese día fue el 24 de abril, justo el día en que su equipo, curiosamente, asaltó el Palau Blaugrana y remontó al FC Barcelona Lassa (86-91). Aquel domingo Thompkins estableció su tope personal de puntos (25), valoración (26), minutos (28), siendo el gran héroe de la remontada blanca en el Palau. Su importancia se cristalizó, sobre todo, en el último cuarto donde sumó 11 puntos (13 de valoración).

A partir de entonces su confianza y minutos en pista crecieron siendo su anotación el feedback que confirmaba la recuperación deportiva de Thompkins. En los 16 encuentros previos, el pívot acumuló 7,8 puntos, desde entonces ha sumado más puntos en menos partidos y promedia 10,7 puntos. El paso ofensivo también se refleja en el otro lado de la cancha, donde su defensa interior cada vez se ha mostrado más sólida colocando 1,67 tapones de media en cuartos de final contra UCAM Murcia. En resumen: Thompkins llegó al 24 de abril valorando un promedio de 7,68 puntos y desde el día que tumbó al FC Barcelona Lassa el pívot acumula una media de 11,38 puntos de valoración.

Los números como reflejo de un estado de ánimo… o al revés. Sólo él lo puede saber con certeza, pero la realidad es que hoy Thompkins es un jugador liberado y feliz por alcanzar su primer Playoff Final de Liga Endesa. "Para mí es muy especial, es mi primer año en la liga española por lo que alcanzar la final de la Liga Endesa en mi primer año es una bendición", señala.

El camino hasta ella tampoco ha sido sencillo para el Real Madrid. El pívot afirma que "nadie dijo que fuera fácil. Esta es la liga más dura. Cada día tienes que salir a jugar a tope y en este Playoff todo ha sido muy duro". Los enfrentamientos contra UCAM Murcia y Valencia Basket así lo atestiguan. Duelos donde, además, Trey Thompkins ha jugado un papel destacado.

Muchas veces como abrelatas, como estilete ofensivo en los primeros minutos encargado de abrir las defensas y desgastar física y anímicamente a los rivales con su versatilidad. Tras estos escollos previos, el jugador se siente participe de un éxito al cual le queda todavía un último peldaño por superar. "Tengo un gran grupo de compañeros alrededor mío, es un gran equipo que me ha enseñado el camino para conseguirlo", comenta.

Y llegados este punto, el pívot ya sabe lo que le espera a partir de este miércoles: "La primera batalla. Va a ser una guerra, una auténtica guerra". Thompkins sabe que queda lo mejor y la tan ansiada recompensa final aguarda. "¡Vamos! mi cuerpo está preparado", arenga… y él ya lo sabe… sólo los fuertes sobreviven.