Redacción, 13 Jul. 2016.- "Fracaso" es una palabra muy fea, pero algo de eso hubo en la carrera de Jiri Welsch en España. Y eso que fueron cuatro temporadas en un lugar tan exigente como el Unicaja de Málaga y uno extra más en el Estudiantes, donde tampoco consiguió el nivel que se esperaba. Como pasa habitualmente, quizás el problema fuesen precisamente las expectativas y el checo había llegado con unas bastante altas después de dejarse ver bastante en la NBA.
Acaba de ganar la cuarta liga consecutiva con el Nymburg, el gran dominador de la competición en los últimos años. Welsch ejerce allí de 'mentor' para los jóvenes y aporta ocasionalmente su experiencia en los minutos complicados, el mismo papel que ha tenido también en los últimos veranos en la emergente selección de Tomas Satoransky y Jan Vesely. A sus 36 años, sus últimas declaraciones indicaban que quería seguir un poco más jugando, emplazando a la directiva de su club a sentarse a la mesa para alcanzar un rápido acuerdo.
Conoce su historia de la mano de Javier Ortiz, en Endesa Basket Lover
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Jiri Welsch: Expectativas checas no cumplidas en Unicaja y Estudiantes
Sergio Scariolo confió en él en el Martín Carpena como uno de los líderes del equipo, pero a la larga se vio que sus características no eran esas. Welsch dejó la impronta de ser un buen gregario
© Jiri Welsch, con la camiseta colegial (ACB Photo / Emilio Cobos)