Lituania aumenta la tristeza israelí (73-88)

Redacción, 02 Sep. 2017.- Lituania sumó su segunda victoria en el Eurobasket tras superar a Israel por 73 a 88 en un partido en el que, después de un primer cuarto a remolque, evidenció su superioridad física.


De la mano de Gal Mekel y Lior Eliyahu (siete puntos cada uno), Israel salió dominando el marcador en los primeros minutos y, sobre todo, dando una mejor sensación en ataque, sobre una Lituania que se mantenía cerca en el marcador gracias al dominio de sus pívots: Motiejunas y Valanciunas. Ambo sumaron nueve puntos en un primer cuarto que se cerró con una ligera ventaja local (23-19).

Como no podía ser de otra manera fue un pívot, Arturas Gudaitis (espectacular con 16 puntos), quien empató el encuentro y poco después Kalnietis completó la remontada lituana. Con la llegada de las rotaciones los lituanos evidenciaron su mayor calidad (los suplentes lituanos anotaron 56 puntos por únicamente dos, los hebreos) y lograron dar la vuelta al marcador con un parcial de 0-9 con un destacado Edgaras Ulanovas (16 tantos). Israel trató de evitar la anotación interior de Lituania con ayudas en el poste bajo, pero realmente sus problemas comenzaron a verse en un ataque donde no tenía referencias ofensivas de tal manera que tuvo que encomendarse en el despertar de Richard Howell (14 puntos al descanso) y Omri Casspi para volver a conectarse al partido y cerrar el primer acto con una mínima desventaja (37-38).

Lituania había perdido el oremus ofensivo, se olvidó de encontrar a sus hombres grandes y eso provocó una ofensiva con mala selección de tiro que permitió correr a Israel y sumar en transición donde sus carencias eran mejor disimuladas. Tras el descanso recuperó ese sentido de su juego y así Kuzminskas (16 puntos) y Maciulis lograron sumar bajo el aro y hacer que los suyos se fueran 10 puntos arriba (39-50) para mayor desesperación de una afición local que veía como en ese tira y afloja, Israel nunca era capaz de atrapar a su rival.

Así las cosas, otro parcial de 2-12 permitió a Lituania alcanzar una máxima de 16 puntos (49-68) poco antes de terminar un tercer cuarto que lo cerró Adas Juskevicius con un triple desde su propio campo. Si ir 20 abajo no hubiera sido suficiente castigo, ese golpe anímico fue definitivo para que Israel hincara la rodilla y capitulara frente a un equipo lituano que recuperó su sensación de equipo completo y con claridad de ideas.