Redacción, 8 sep. 2017.- La primera jornada del Circuito de Pretemporada Movistar by Liga Endesa de Logroño se ha cerrado con el triunfo del Monbus Obradoiro frente al Baskonia (82-96).
El partido arrancó a un ritmo alto, con intercambios de canastas que, de inicio, favorecieron al Monbus Obradoiro, equipo que tomó las primeras ventajas. Además, con el paso de los minutos, su intensidad defensiva fue en aumento, provocando varias pérdidas consecutivas en el Baskonia, que fueron aprovechadas por el ataque gallego para poner tierra de por medio (6-12, m.4).
Como buen director de juego, fue Marcelinho Huertas quien se puso al mando de la nave vitoriana. Sus certeros pases, además de su eficacia de cara al aro, fueron el acicate que necesitó su equipo para evitar que la diferencia se hiciera mayor (12-15, m.5).
Pero los de Moncho Fernández no parecían dispuestos a permitir esta remontada y metieron una marcha más para frenar cualquier reacción que pusiera en peligro su dominio. Con Nemanja Radovic (8 puntos) y Nacho Llovet (7) como hombres más acertados en estos primeros minutos, endosó al Baskonia un parcial de 5-15 que abría la primera brecha importante del encuentro, momento que coincidió además con el retorno de un recuperado Alberto Corbacho. Al final del primer cuarto se llegó con un claro 19-31 en el marcador.
Con algunas imprecisiones arrancó el segundo periodo. A ambos equipos les costaba encontrar con facilidad el aro, algo que llevó a ambos técnicos a mover sus banquillos y a buscar ese quinteto que encontrara mejor su lugar en la pista. Ambos fueron ajustando sus defensas, lo que les obligó a trabajar más para encontrar el aro.
Con este panorama, el Monbus Obradoiro volvía a salir beneficiado, viendo como su ventaja se mantenía con el transcurrir de los minutos. Fue un triple de Corbacho en el minuto 12 el que puso en 14 puntos la ventaja gallega (24-38). Ante esta situación, Pablo Prigioni ajustó líneas y, con Huertas y Granger compartiendo sitio en la pista, el Baskonia cambió su rumbo, consiguiendo un parcial de 7-0 que le metía de lleno en la lucha (45-50). Una canasta sobre la bocina David Navarro dejó el marcador al descanso en 45-52.
Dos triples consecutivos, uno de Matt Thomas y otro de Ben Simons, pusieron en órbita de nuevo al Monbus Obradoiro tras el paso por los vestuarios (45-58), aunque encontraron una pronta respuesta por parte del Baskonia que, gracias a un nuevo lanzamiento de tres puntos, esta vez por parte de Jordan McRae, podía tomar algo de aire en un encuentro que se le estaba poniendo cuesta arriba (48-58).
Pero, pese al acierto vitoriano, especialmente de un inspirado Jayson Granger (a la postre, máximo anotador del partido con 18 puntos), era complicado remontar frente a un equipo que anotaba de tres en tres. Transcurridos algo menos de tres minutos, los 15 puntos que había sumado el Monbus Obradoiro habían llegado desde más allá de la línea de 6,75 (52-67).
Una vez que el Baskonia consiguió complicar el tiro exterior de su rival, las fuerzas se nivelaron y, gracias a una canasta en el último segundo de Arturs Kurucs consiguió cerrar el tercer cuarto "sólo" con 10 puntos de desventaja (69-79).
El cuarto periodo arrancó de nuevo con tres puntos de Monbus Obradoiro, esta vez gracias a un 2+1 de Alberto Corbacho. Tras sumar Matt Thomas y devolver los 15 de ventaja al equipo gallego (69-84), Prigioni lanzaba consignas a sus jugadores, exigiendo velocidad en sus ataques y máxima tensión en defensa. Tampoco se quedaba atrás Moncho Fernández, también intenso desde la banda y muy expresivo hacia sus jugadores, sabiendo que el reloj corría a su favor.
El técnico baskonista apostó fuerte, poniendo un quinteto muy joven sobre el parqué pero las ganas de los Kurucs, Raieste o Malmanis no fueron suficientes para anular la ventaja de un Monbus Obradoiro que se llevó un merecido triunfo en su estreno en Logroño (82-96).
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