La Laguna (Tenerife), 1 nov. 2003 (EFE).- El partido estuvo marcado por la igualdad en los dos primeros cuartos, con porcentajes de tiro más que discretos, pero se fue decantando progresivamente a favor de los canarios, que le cerraron todas las vías a su adversario, que sumó tras el descanso la ridícula cifra de 17 puntos, la mayoría obra de Stacey y Roe.
Los dos entrenadores plantearon su estrategia desde la defensa, y en un principio los de Casimiro se llevaron la palma, pues supieron encontrar con una buena circulación del balón la mejor selección del tiro para tomar la delantera, sin depender excesivamente de Lou Roe, pues los puntos visitantes estuvieron muy repartidos.
Los tinerfeños apelaron a la velocidad en el contragolpe para equilibrar la balanza, y de la mano de un siempre fiable Hopkins se adjudicaron un primer cuarto tremendamente disputado (20-18).
Una mala salida a la pista del Etosa Alicante más un triple de Iván Corrales supuso el primer atisbo de ruptura (25-18 min. 12) que, sin embargo, Roe y Stacey se encargaron de abortar rápidamente con un parcial de 0-7.
Ambos equipos se atascaron, sin que las constantes rotaciones de sendos banquillos aportara frescura en una fase gris de la que salieron mejor parados los locales, que administraron su renta con buenos números en el rebote ofensivo, aunque acogieron con preocupación la tercera personal de Hopkins antes del descanso (39-35).
El Etosa Alicante se desangraba con los rebotes que dejaba escapar, y en cuanto al Unelco Tenerife le empezaron a salir medianamente las cosas en ataque volvió a amagar con romper el partido (45-35 min. 24), y es que su adversario se pasó más de cinco minutos sin anotar un solo punto.
Una vez más, los alicantinos echaron mano de Anthony Stacey cuando peor lo tenían, pero en esta ocasión el agujero en el marcador, aunque no era definitivo, sí tomó consistencia para alcanzar el último cuarto con un parcial de 54-44.
Los de Paco García salieron a resolver por la vía rápida explotando su intensidad defensiva, que literalmente ahogaba el ataque alicantino, así la muñeca de Diego Sánchez para adquirir la que entonces era su máxima ventaja (59-46, min. 33).
En esos instantes, la mejor noticia para el Etosa era que Savané y Hopkins estaban al borde de la eliminación, lo que les hacía concebir esperanzas de forzar un final apretado, pero un Toledo muy sacrificado, y en general el banquillo del Unelco Tenerife no dieron opciones a un equipo visitante que al final se hundió (73-52).
73. Unelco Tenerife (20+19+15+19): Corrales (7), Palladino (-), Yáñez (12), Savané (10) y Hopkins (20) -inicial-. También jugaron Gil (4), Robles (-), Toledo (7), Sánchez (7) y Guillén (6).
52. Etosa Alicante (18+17+9+8): Hernández (2), Angulo (2), Stacey (13), De Miguel (2) y Roe (20) -inicial-. También jugaron Tomic (3), Lázaro (2), Gómez (6), Junyent (2) y García (-).
Arbitros: Llamazares, Conde y Cardús.
Incidencias: Partido correspondiente a la novena jornada de la ACB disputado en el pabellón Santiago Martín de La Laguna, al que acudieron unos 3.800 espectadores.
Crónica
Unelco Tenerife suma con oficio otra gran victoria (73-52)
El Unelco sumó ante el Etosa Alicante su quinta victoria del curso, ésta de valor doble por cuanto lo hizo a costa de un, hoy por hoy, rival directo por la permanencia, en una demostración de oficio, ya que ganó el partido desde la defensa y con una gran aportación desde el banquillo, todo lo contrario que los visitantes
© La aportación de Roe fue insuficiente para el triunfo de su equipo (Foto EFE)