Los retos en el horizonte blanco

El Real Madrid tiene en su mano conseguir algo que no ha logrado nadie con el actual formato de competición: acabar una fase regular entera como invicto fuera de casa. El conjunto de Pablo Laso ha jugado hasta el momento quince partidos como visitante y los ha ganado todos. Sin excepción.

Además, lo ha hecho de una forma contundente. Más de la mitad fue por una diferencia de dos dígitos, con una media total de 12 puntos en sus victorias fuera de casa. Eso sí, en sus dos últimos compromisos como visitante tuvo que sudar de lo lindo para mantener su racha, sobreviviendo en Manresa (76-77) y conquistando el Palau contra el Barça (85-87) con un 2+1 ganador de Laprovittola.

Repasando la historia blanca, solo hay un precedente que se asemeje a lo que está haciendo el Real Madrid este año, el 14-0 de la temporada 1984-85, si bien aquel curso se dirimió con un formato muy diferente, de primera y segunda fase (14 partidos en cada una de ellas) antes del Playoff por el título. El 15-0 actual supera este precedente, aunque el reto blanco es un 18-0 como visitante que no se ha visto en la historia de la competición.

En la historia contemporánea blanca, el precedente más parecido ocurrió en la temporada 2013-14, aquella repleta de récords por parte del Real Madrid, en la que el conjunto madrileño solamente cedió en su penúltimo desplazamiento, en la cancha barcelonista, para acabar con un 16-1 de balance lejos de su público.

Por ello, se presenta apasionante el doble reto que le avecina en esta recta final de Liga Endesa. En siete días, de domingo a domingo, los de Pablo Laso disputarán dos encuentros como visitante, frente al Urbas Fuenlabrada y al Casademont Zaragoza, que pueden dejarle a un solo paso de la gesta.

En caso de seguir invicto, solo le quedaría un paso más, precisamente la última jornada de la fase regular, en el siempre difícil Martín Carpena de Málaga, para aspirar al pleno perfecto.

(* No se pudo completar la fase regular por la pandemia)

Mucho se habló durante bastantes meses de la formidable racha de victorias madridista, allá por la temporada 2013-14, alcanzando las 28 de forma consecutiva. Sin embargo, sin hacer tanto ruido, en estos momentos el Real Madrid 2020-21 iguala los números de ese equipo, presentando un idéntico balance de 30 triunfos y una sola derrota, tras 31 partidos ligueros disputados. Nadie alcanzó números similares en era acb.

Aquella plantilla entrenada por Pablo Laso, en la que ya estaban Rudy Fernández, Jaycee Carroll, Sergio Llull y Felipe Reyes, ostenta hasta la fecha el máximo número de victorias de un equipo en Liga Endesa, con un balance de 32-2 (94,1%) que el equipo tiene en su mano superar.

Los de la capital afrontan los últimos cinco partidos de fase regular con un ilusionante reto en el horizonte, el de firmar la mejor regular de la historia. Con cinco triunfos en los cinco partidos restantes, el cuadro blanco elevaría el tope hasta un casi insuperable 35-1, que supondría un 97,2% de triunfos sin parangón en la historia de la competición.

Desde el establecimiento en la temporada 1996-97 del formato actual de competición, con 18 equipos, (con las excepciones de la 2008-09 y 2016-17, con 17 equipos, y de esta 2020-21, con 19), solo Real Madrid (curiosamente, siempre en tiempos de Laso), Barça y Valencia Basket han logrado cruzar la frontera de las treinta victorias.

Es más, abarcando todo el periodo acb, desde la 1983-84, y contando formatos antiguos de doble fase en los que se alcanzaran los treinta partidos ligueros, únicamente Joventut 90-91 (30-4) podría incorporarse a este club de élite, que rozó el Baskonia en la 2008-09, con un balance de 28-4 que, en caso de haber habido un par de jornadas más, probablemente le hubiera permitido entrar en esta lista.

En su mano, protagonizar la mejor temporada regular de la historia e igualar el precedente de la 1984-85, cuando entre la primera y la segunda fase solo tropezó una vez, llegando a Playoff con un balance de 27-1 (96,4%), que podría ser batido en estas próximas semanas.

• 19-3 en la primera fase y 11-3 en la segunda.

Más allá del Real Madrid, únicamente el Monbus Obradoiro sabe lo que es ser líder en esta Liga Endesa 2020-21. Ocurrió en la Jornada 1. Y es que la fantástica racha inicial del conjunto de Pablo Laso pronto lo dejó solo en cabeza. Trece partidos, trece victorias.

A finales de diciembre, el Barça se convirtió en el único equipo capaz de derrotar a los madridistas, cortando la racha blanca y estirando la suya propia. Esta llegó a ser la mejor de la temporada, 16 triunfos ligueros consecutivos, justo antes de que se repitiera la historia... ahora con los papeles cambiados.

En el último Clásico, el Real Madrid rompió la dinámica ganadora barcelonista y prolongó su propia racha de triunfos, que vuelve a ser la mejor de la 2020-21, tras encadenar 17 éxitos seguidos.

Y es que el cuadro merengue destaca en prácticamente todos los apartados estadísticos posibles. Líder en triples (11,24, con un 40%, el 4º mejor porcentaje de la competición), rebotes defensivos (27) y tapones (3,71), los madrileños también rozan el liderato en capturas totales (36,5) y valoración (103,8).

Capaz de ser Top4 liguero tanto en defensa (2º, con 75,7 puntos recibidos) como en ataque (4º, con 87,4), el Real Madrid también aparece muy alto en el ranking de acierto en tiros libres (3º, con 79,8%), mates (2,84) o tiros de dos puntos (5º, con 56,43%).

En el plano individual, más allá de la lucha de Jaycee Carroll por ser el mejor lanzador de tiros libres (2º actualmente, con un 96%), el nombre propio es Walter Tavares, embarcado en su lucha por ser el MVP Movistar de la 2020-21. El pívot será uno de los grandes candidatos al galardón por una temporada excelsa.

Líder en tapones (2,3) y en el rebote ofensivo (3,16), además de 2º en el ofensivo (4,96) y el global (8,13), el de Cabo Verde es el cuarto que más veces machaca (1,5) y el tercero en valoración (19,2), amén de indiscutible líder en el +/-, con un +12,1 de media para su equipo cada vez que él está en pista.

Más allá de retos colectivos o individuales por firmar en este tramo final de competición, el Real Madrid se propone un reto que mejore la tan excelsa 2013-14, que con tan mal sabor de boca acabó. Y es que aquel equipo imbatible durante meses acabó el Playoff con las manos vacías, algo que no está dispuesto a vivir de nuevo. ¿Redondeará su gran año?