Crónica

El TAU incrementa su estado de gracia al superar al Winterthur FCB (68-82)

El TAU Cerámica mantiene su racha de victorias tras superar al Winterthur FC Barcelona en el Palau Blaugrana (68-82). Los de Ivanovic sentenciaron el encuentro tras el descanso, después de muchos minutos de igualdad. Luis Scola y Tiago Splitter volvieron a ser los jugadores que marcaron la diferencia

Dejan Bodiroga intenta superar a Arvydas Macijauskas en su penetración (Foto EFE)
© Dejan Bodiroga intenta superar a Arvydas Macijauskas en su penetración (Foto EFE)
  

Barcelona, 20 abr. 2005 (EFE).- El TAU Cerámica continúa su paso triunfal en la Liga regular, estado de gracia que volvió a evidenciar en la pista del Winterthur FC Barcelona (68-82), donde el conjunto local perdió su segundo partido consecutivo tras caer anteriormente contra el Pamesa, y después de vencer en la pista del Madrid.

El Barça se complicó la vida en la Liga, ya que su objetivo de conseguir la cuarta posición, y tener el campo a favor en la fase final, deberá lucharla en inferioridad en las cuatro jornadas que quedan.

El partido entre ambos conjuntos tuvo a tres claros protagonistas: Scola, en el primer tramo del partido, ya que asumió en solitario la responsabilidad anotadora de su equipo, y la dupla Splitter-Macijauskas en la recta final, letal y vital para su equipo.

El TAU encontró una vez más una válvula de escape a su juego ofensivo en el argentino Luis Scola, el jugador más acertado del partido (21 puntos), y contra el que el Winterthur FC Barcelona se sintió incapaz para detenerlo. Las acciones del TAU estaban pautadas: entrada de un jugador bajo, balón a Scola, un movimiento y pelota contra tablero o directamente a canasta. Zizic, Fucka y Gasol vieron reiteradamente esta acción ante sus ojos y nada pudieron hacer.

En el aro contrario, el Winterthur FC Barcelona tuvo más argumentos y rindió a un gran nivel, con Zizic como jugador más destacado. Su sexto punto (15-11) coincidió con la ventaja más holgada de su equipo, que en el segundo periodo repetiría (32-28).

La zona inicial del Barça, que resultó bastante precaria, empezó a dar sus frutos hasta que un balón se dirigía a las manos de Scola, porque la canasta estaba asegurada. La única suerte para el Winterthur FC Barcelona es que la ofensiva de su rival no tenía más elementos que el argentino, ya que Macijauskas estaba, por el momento, negado ante la canasta.

Victor Sada sube el balón defendido por José Manuel Calderón (Foto EFE)
© Victor Sada sube el balón defendido por José Manuel Calderón (Foto EFE)
El TAU cerró la primera parte en su mejor momento hasta entonces (34-38). En el tercer periodo, los nueve puntos de ventaja que adquirió la entidad vasca (40-49), la última canasta con mate incluido de Macijauskas (su primer canasta en el partido) fueron respondidos por el mejor parcial del Barça en todo el partido (10-2, 50-51), gracias en parte a un comprometido Juan Carlos Navarro, que entró tarde en el choque, pero que lo acabó como uno de los máximos anotadores de su equipo (16), tras los 18 puntos de Fucka. Fue la última gran acción del conjunto catalán.

Iniciado el último cuarto, al Winterthur FC Barcelona se le vino abajo su defensa, debido a la velocidad endiablada con la que se aplicó el TAU. Fue también cuando llegaron los triples de Macijauskas y Vidal, dos cada uno, que acabaron de rematar a un Barça que tuvo una mejor reacción en un parcial de 11-4, cuando el marcador ya le era desfavorable de trece puntos (57-70).

68 - Winterthur FC Barcelona (19+15+16+18): Ilievski (5), Bodiroga (13), De la Fuente (-), Zizic (8), Fucka (18) -equipo inicial-, Navarro (16), Sada (-), Gasol (4), Davis (2) y Grimau (2).

82 - TAU Cerámica (17+21+17+27): Prigioni (2), Macijauskas (14), Hansen (-), David (6), Scola (21) -equipo inicial-, Calderón (12), Vidal (13) y Splitter (14).

Arbitros: Ramos, Gallo y Araña. Eliminado con cinco faltas personales: Kornel David (min.37).

Incidencias: partido correspondiente a la trigésima jornada de la Liga ACB, disputado en el Palau Blaugrana del FC Barcelona ante 5.812 aficionados, según datos facilitados por la ACB.