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Tercera entrega de la apasionante batalla madrileña

Tercer partido de la apasionante eliminatoria entre Real Madrid y Adecco Estudiantes, cuyos dos primeros partidos resultaron altamente atractivos e igualados. El tercer envite promete cotas de emoción igualmente altas y su resultado puede ser vital para el desenlace final de la eliminatoria

Dusan Vukcevic machaca ante Andrae Patterson. El espectáculo preside esta serie (EFE)
© Dusan Vukcevic machaca ante Andrae Patterson. El espectáculo preside esta serie (EFE)
  

Redacción, 19 May. 2002.- Tercera entrega de una serie igualada, apasionante, espectacular y de resultado incierto. Real Madrid y Adecco Estudiantes, Adecco Estudiantes y Real Madrid, están protagonizando una eliminatoria abierta, cuyos dos primeros encuentros se resolvieron por un estrechísimo margen y en los últimos segundos.

El tercer partido, que se disputará en el Raimundo Saporta, probablemente mantenga las mismas dosis de emoción e igualdad que los partidos anteriores, pues estos factores no sólo se remontan a la eliminatoria de este año, sino a anteriores disputadas campañas atrás. Y es que la historia dice que en las eliminatorias Real Madrid - Adecco Estudiantes, todos los encuentros (95%) se resuelven con victoria local. De hecho, el conjunto blanco jamás ha perdido en casa ante el 'Estu' en unos Playoffs.

Este encuentro puede ser el más importante de la eliminatoria. El ganador se situará 2-1, pasando toda la presión a su rival y disponiendo de un matchball para poder decidir en el cuarto partido. Este hecho sería especialmente relevante en caso de que el 2-1 fuese favorable a Adecco Estudiantes, ya que los colegiales gozarían de la posibilidad de sentenciar ante su propia afición.

Nuevamente el encuentro estará marcado por las ausencias de dos jugadores, dos bases. El Adecco Estudiantes no podrá contar con Gonzalo Martínez, cuyo concurso en el resto de la serie está en el aire, y el Real Madrid mantiene la seria duda de Sasha Djordjevic, que salvo sorpresa no podrá actuar ante el equipo colegial.

El Real Madrid suspira por recuperar a Sasha Djordjevic. El base yugoslavo podría solucionar el grave problema del equipo blanco en ataque, donde a menudo se cae en la precipitación y en las pérdidas. Pese a que Raúl López y Stefano Attruia están muy acertados de cara a canasta, no mantienen tal grado de acierto en lo que a dirección del equipo se refiere.

Adecco Estudiantes impone un ritmo rápido, en ocasiones alocado y arriesgado, y está consiguiendo sacar al Real Madrid de su juego habitual, más lento y metódico, ya que si bien el equipo madridista nunca ha renunciado a los contraataques, no corre por sistema. Esto hace que el Real Madrid sufra incontables pérdidas, desperdiciando así las posesiones generadas por su superioridad en el rebote.

Y es que no cabe obviar que el Real Madrid está mostrándose inmensamente superior a Adecco Estudiantes bajo tableros. Los batalladores hermanos Reyes hacen su trabajo, como siempre, pero se ven en serios problemas ante torres tales como Tabak, Struelens o Tarlac, que controlan el rebote y consiguen anotar. El buen momento de estos tres colosos ha hecho que se reduzca considerablemente el tiempo de juego de Hernández-Sonseca, que al igual que los hermanos Angulo apenas está pisando la cancha esta eliminatoria.

Lógicamente, la contundencia de los pívots blancos tiene también sus aspectos negativos para el Real Madrid, y de los que se está aprovechando perfectamente Adecco Estudiantes. Y es que el equipo colegial goza de una versatilidad y movilidad que carecen las torres merengues, a las que puede sacar a posiciones lejanas del aro. Además, esta posibilidad de jugar en poste alto y poste bajo se traslada también al puesto de '3', donde Jiménez resulta prácticamente imparable para un Real Madrid cuya solución de emergencia es un cumplidor Iker Iturbe.

Pero, por encima de todas estas facetas que pueden resultar claves, lo más decisivo y bonito de la eliminatoria es el duelo de colosos entre Raúl López y Nacho Azofra. Separados 11 años en el tiempo, están protagonizando un enfrentamiento de alto standing, desde la capacidad resolutiva del primero en carrera y en 1-contra-1 a la sapiencia y conocimiento del juego del segundo, que además de dirigir con solvencia a su equipo está siendo capaz de anotar y, lo que es más importante, de tirar del carro de su equipo en los minutos decisivos