Redacción, 25 Mayo 2008.- ¡Asombroso final en el Martín Carpena! El TAU Cerámica perdía por cuatro a falta de nueve segundos pero un triple lejano de Prigioni y dos tiros libres errados por Kus abrieron la puerta al milagro vitoriano... consumado por Pete Mickeal. El alero recogió el rebote, corrió toda la pista sin miedo y lanzó una canasta con rectificado por encima del interminable brazo de Ndong. ¡Bingo! 82-83 a falta de 2,6 segundos, sin que el Unicaja pudiera responder.
Victoria del TAU Cerámica, 2-0 y Final ACB para los vitorianos, que se medirán a partir del jueves al AXA F.C. Barcelona por el título liguero. Una final inédita y nuevo paso de un TAU Cerámica que ya jugó la final de la Copa del Rey, ganó la Supercopa ACB y participó en la Final Four de Madrid.
El partido fue un toma y daca, con Rakocevic dirigiendo a los vitorianos con un excepcional primer cuarto y continuidad en el tercero, y Splitter jugando muy buenos minutos para comandar al TAU Cerámica. Pero el Unicaja redobló la intensidad del duelo del viernes y el brío de Cabezas y Berni y el poderío de Ndong y Haislip abrieron la puerta a la esperanza. Parecía que se llevarían el gato al agua, pero el último minuto dio al traste con su sueño finalista.
Rakocevic empieza marcando diferencias
El Unicaja salió con el cuchillo entre los dientes. Apenas tenía que ver con el de Vitoria. Para empezar, Carlos Cabezas se lucía con dos bravas acciones (10-9)... pero la desbordante intensidad del Unicaja tenía réplica en un espectacular acierto del TAU Cerámica, personalizado en la figura de un excelso Igor Rakocevic: dos triples y dos canastas de dos en apenas unos minutos... y mando por 14-20 para los de Spahija.
El partido ondulaba en un principio hacia el lado vitoriano, combinando la anotación de Rakocevic con el sobrio papel interior de Splitter, en un inicio superior a Ndong, y la dirección de Prigioni. Pero eran ventajas cortas, casi exiguas, y un arrebato anotador de Marcus Haislip, con un sensacional mate como colofón, daba al Unicaja el mando (32-29).
Unicaja aguanta los tirones del TAU Cerámica
Pero la ventaja malagueña sirvió como acicate al TAU Cerámica, que encontró en Zoran Planinic a su nuevo referente y consiguió un parcial de 5-17 para despegar de nuevo: 37-46. Una vez más, Haislip (11 puntos en el segundo cuarto) tomaba las riendas y con cinco puntos consecutivos apretaba el choque antes de que Ndong enviase el partido al intermedio con 44-46.
Rakocevic, algo diluido en el segundo periodo, apareció con pleno esplendor tras el intermedio: siete puntos casi consecutivos daban de nuevo aire al TAU (52-58), pero una vez más el Unicaja replicaba con cinco puntos seguidos de Ndong, igualando a 58. El senegalés se había hecho con el control de los tableros, huérfanos de Splitter 4 faltas-; canasta aquí, tapón allá, rebote en todos los sitios...
Los locales se avanzan, el TAU responde
Por fin, a 32 segundos de la finalización del tercer periodo, el Unicaja logró adelantarse y poner fin así a la larga escapada vitoriana: 62-60 con dos tiros libres de Santiago. Una canasta de Berni Rodríguez sobre la bocina enviaba el partido al cuarto clave con 64-60.
Pero el TAU Cerámica recurrió a Splitter y cambió de cara. Cuatro puntos del brasileño y un triple de Vidal cambiaban el partido (66-69). El partido transcurría no obstante en márgenes de igualdad (71-71), entrando en los tres minutos finales con todo abierto e igualado.
Final de película
Vidal anotaba de tres a falta de 2:20 pero Jiménez replicaba justo a continuación: 76-76 al entrar en los dos minutos finales. Una inteligente acción de Berni Rodríguez, forzando una falta en su intento triple a 1:09 valió doble, adelantando a los suyos 78-76 y fallando Prigioni dos ataques seguidos. El partido mecía en las manos del Unicaja: balón, 29,6 segundos y dos arriba. Ndong acudía a los tiros libres y no fallaba, 80-76.
Rakocevic anotaba de modo inmediato (80-78) pero fallaba un tiro libre vital. Berni no erraba y Unicaja seguía mandando (82-78), pero Prigioni acertaba desde ocho metros: 82-81 a 8,6 segundos. Kus, un 93% miraba por primera vez el aro en todo el partido, con tiros libres... ¡y erraba ambos! Mickeal corría toda la pista en un fulminante contraataque y anotaba a 2,6 segundos: ¡82-83!
Quedaba una oportunidad para el Unicaja, sacando desde su canasta, pero Cabezas apenas pudo levantarse y el TAU Cerámica selló su billete para la Final ACB.