Artículo

Estados Unidos: De la arrogancia a la humildad

El sábado 16 de agosto España se enfrentará a Estados Unidos en los Juegos Olímpicos. Àlex Gozalbo analiza desde Nueva York las nuevas sensaciones con las que el equipo norteamericano afronta el reto

Estados Unidos se prepara a fondo para redimirse
© Estados Unidos se prepara a fondo para redimirse
  

Estados Unidos escucha las tres letras que forman las siglas ACB y, como mínimo, pone cara de respeto. Algo ha cambiado en la cuna del baloncesto, donde el partido que les debe enfrentar a la selección española el próximo sábado 16 de agosto es visto con aprensión.

“España es una de las favoritas a la medalla de oro gracias al trío que forman Gasol, Calderón y Rubio”, deja escrito Nick Rotunno en la versión online de la revista Slam. Leer una opinión así procedente de Estados Unidos no fue posible hace dos años, cuando España se colgó posteriormente la medalla de oro en el Mundial. Ahora, en cambio, las cosas han cambiado. La arrogancia ha dejado paso a la humildad y la prensa norteamericana hace bandera de ello.

Desde que Lang Whitaker viajara a España para publicar un reportaje en la revista Slam de Ricky Rubio (“The best basketball player you’ve never heard of”), los norteamericanos miran de reojo al base del DKV Joventut. Sienten devoción y miedo a partes iguales. Hace unas semanas Chad Nielsen, otro reconocido periodista norteamericano, viajó a Badalona y Valencia exclusivamente para seguir de cerca el nacimiento del fenómeno de masas que se está generando alrededor del joven jugador. El resultado de su completa investigación vio la luz hace unos días en la publicación ‘ESPN The Magazine’ bajo el titular de “La pistola”. Como es fácil deducir, las comparaciones con Pete Maravich son constantes.

El inicio del artículo no deja dudas sobre la calidad del joven de 17 años: “El mejor base del que nunca has oído hablar pasea a través de las calles de El Masnou, una localidad situada a diez millas de Barcelona”. En el texto se destaca su afán por mejorar, que le llevó a pasar “la mitad del mes de junio en Los Angeles trabajando con un entrenador de tiro buscado por su agente en Estados Unidos, Dan Fegan.

Los protagonistas del reportaje que ‘Bounce’ le dedica estos días a Ricky Rubio son Esteve y Tona, sus padres. La Biblia del baloncesto callejero, que se reparte gratuitamente junto a canchas míticas de Nueva York como ‘Rucker Park’ o ‘The Cage’, presenta en sociedad al base. El texto, firmado desde España por Antonio Gil (‘Gigantes del Basket’), se titula “Rubio, The Fenómeno”.

“Conozco a Bobbito García -editor de la revista- y surgió la posibilidad de colaborar con ellos. Les propuse hacer un reportaje sobre Ricky Rubio y les pareció muy bien porque el interés que despierta el jugador en Estados Unidos es cada vez mayor”, explica Gil. En el texto, que va acompañado con una fotografía de Emilio Cobos, se destaca que el base “fue el líder en robos de la ACB”.

La mayoría de medios norteamericanos analizan estos días la cita de Pekín. La revista Time, por ejemplo, dedica su última portada a LeBron James, uno de los 100 atletas que seguir en los Juegos Olímpicos. En un reportaje que firma Sean Gregory se explica que “ahora mismo, EEUU necesita al LeBron James de casa en un partido internacional (…). Pero el juego estadounidense se ha construido con un solo pívot verdadero, Dwight Howard”. Eso, las pocas variantes en el juego interior, es algo que inquieta asiduamente a los analistas norteamericanos. “En España, que defenderá el título de campeón del mundo, destacan Pau Gasol y José Calderón”, destaca el artículo.

Según se destaca en el texto de la revista, al jugador de los Cavs le gusta el lema que USA Basketball ha escogido para los Juegos Olímpicos de Pekín; "Road to redemption”. “Quiero que el baloncesto estadounidense sea dominante otra vez. La gente debe ver el rojo, el blanco y el azul y temernos", opina James.

En la calle 125 de Nueva York, en pleno barrio de Harlem, la “House of Hoops” expone las ocho zapatillas de los jugadores internacionales que más pueden brillar en los Juegos Olímpicos de Pekín. El 51 ½ de Pau Gasol no falta en la colección.

A escasos metros de allí la tienda oferta una camiseta con los nombres de los doce jugadores que buscarán el oro para Estados Unidos. En ella, dos inscripciones importantes. En una, la fecha (“8.8.8”) de inicio de los Juegos Olímpicos. En otra, la frase que quieren convertir en lema: “United we rise”.

Una pantalla de televisión va desvelando las armas con las que Estados Unidos pretende superar a España. Jason Kidd explica su “Fade and finish” con la misma facilidad con la que luego se marchará de sus defensores. Kobe Bryant, por su parte, se entretiene detallando su clásico “Pump fake and pivot”. La novedad es su actitud, no su estrategia.

Tal y como recuerda el especial ‘Olympic Hoops’08’ de la revista ‘Slam’, sólo siete países fuera de Estados Unidos (Alemania, Argentina, Australia, China, Lituania, Puerto Rico y Rusia) tienen, como España, zapatilla de la marca Nike personalizada. Las marcas comerciales ya se frotan los ojos con el duelo que se avecina el sábado 16 de agosto.

Estados Unidos respeta a sus rivales en los Juegos Olímpicos
© Estados Unidos respeta a sus rivales en los Juegos Olímpicos
El pívot catalán de Los Angeles Lakers es como una obsesión para los norteamericanos. Sam Rubenstein le dedica ocho páginas a Pau Gasol (“Don’t play around 16”) en ese mismo ejemplar especial. “Su estatus como mejor segunda opción de la NBA es seguro. Mientras tanto, su rol en el juego internacional es incluso más pronunciado: reina como el MVP global”, dicen de él, apenas unos párrafos después de recordar su mágica temporada 2000-01 en la ACB.

La revista ‘Sports Illustrated’ dedica tu portada a realizar su (cada cuatro años) clásica “Olympic Preview”. El periodista Alexander Wolff titula su artículo dedicado al equipo norteamericano “The redeam tream”. En él destaca que Jerry Colangelo ha dado desde los despachos un giro de 180 grados al trabajo habitual de la selección estadounidense, imitando los proyectos de Argentina o España. La base del equipo que competirá por el oro en los Juegos Olímpicos lleva tres años trabajando junta.

El cambio que pregona la selección estadounidense es evidente en “The Commitment”, una exposición coordinada por USA Basketball que se puede visitar en pleno barrio neoyorquino de Harlem. Todo hace referencia al compromiso. A la entrada, las camisetas de los 12 jugadores que representarán a Estados Unidos en Pekín. Al fondo, 320 zapatillas rojas, blancas y azules imitando los colores de la bandera norteamericana.

De tres a siete de la tarde los estadounidenses pueden entrar y, tras ver las zapatillas de sus principales rivales (entre las que no faltan las de Pau Gasol), sentarse ante una pantalla que emite los entrenamientos de la selección que entrena Mike Krzyzewski. Todo emana esfuerzo, ganar ya no será nunca más sencillo.

“Lo mejor que he aprendido es cómo los muchachos han aparcado sus egos y sus logros individuales para convertirnos en un equipo. Todos nosotros tiramos por la ventana nuestras individualidades cuando nos reunimos para trabajar juntos en Las Vegas”, recuerda LeBron James con una frase manuscrita en la pared. No importa hacia dónde dirija uno la vista, todo en la exposición hace referencia al equipo, al compromiso y a la unidad.

Al salir, a modo de resumen, el visitante debe leer en voz alta la siguiente frase: “Work hard, sacrifice now and life the rest of your life as a champion”. Esa actitud es, precisamente, la que el sábado 16 de agosto se encontrará España.