Berlín, 3 may. 2009 (EFE). - El entrenador del Panatinaikos Atenas, Zeljko Obradovic, se declaró hoy orgulloso de su equipo por lo que hizo en la primera mitad del partido frente el CSKA, cuando sacó una ventaja de veinte puntos con los que sentó los cimientos para coronarse campeón de Europa.
"Es claro que estoy muy orgulloso de mi equipo, lo que hizo en la primera parte fue algo extraordinario", dijo Obradovic.
De la segunda parte, cuando el CSKA recortó las diferencias para perder el partido sólo por un punto, Obradovic dijo, por una parte, que era claro que había que esperar una reacción del rival que es un gran equipo y dijo que creía que habían pasado además "cosas raras" de las que todavía no quiere hablar.
"Creo que en la segunda mitad pasaron algunas cosas raras. No quiero hablar de ellos porque no estoy seguro, pero volveré a ver el partido para asegurarme", dijo Obradovic.
Obradovic felicitó además al entrenador rival de hoy, Ettore Messina, por haber llegado a cuatro finales entre cuatro seguidas y dijo que era uno de los grandes entrenadores de Europa que había hecho del CSKA Moscu un gran equipo.
Obradovic se refirió también a los últimos diez segundos del partido, cuando Ramunas Siskaukas falló un lanzamiento desde tres puntos que le hubiera podido dar la victoria al CSKA.
"En los últimos diez segundos decidí decirle al equipo que evitáramos las faltas. Si Siskaukas hubiera marcado el triple todo el mundo me estaría criticando, pero ahora creo que fue una buena decisión", dijo sonriendo.