Holden da el tercer puesto al CSKA con broche final de emoción (90-88)

París, 8 May. 2010.- El CSKA Moscú termina tercero la Final Four tras vencer en un encuentro de mayor distensión en la primera mitad, con un Trajan Langdon maravilloso, y de fría y ficcionada igualdad en la segunda. Con más minutos para jugadores menos habituales, la igualdad final hizo lucir un poco un choque que es, habitualmente (y esta no iba a ser menos), el calentamiento de las aficiones de cara a la final.

Langdon maravillaba con una primera parte de ensueño. Empezando por unas clases de tiro para empezar a adelantar a su equipo (13-8) y siguiendo imparable forzando faltas para irse hasta unos sobrenaturales 15 puntos en 10 minutos (19 de valoración). Los moscovitas se encontraban mucho más a gusto en ataque que en semifinales, lo que les permitía lanzar con porcentajes muy superiores y adelantarse en el marcador (25-20, fin del primer periodo) de un partido algo más distendido y vistoso. El Partizan, envuelto en esa mayor facilidad griega, no mostraba la solvencia y sobriedad que le caracteriza, aunque todavía aguantaba, con los puntos de Vesely (incluido un espectacular alley-oop en conexión con McCalebb).

Un Viktor Khryapa más cercano a su extrema incidencia, acompañado de nuevo por un Langdon tocado por magia divina (22 tantos al descanso), lanzaban al CKSA a diferencias superiores a la decena (33-22). Ambos equipos aprovechaban el segundo cuarto para dar minutos a jugadores menos habituales, con buen hacer de Vorontsevich (10 puntos en el partido), mientras los aficionados de Olympiacos se encargaban de precalentar la final. El Partizan, más suelto de lo habitual, se mantenía merced a Roberts y al 60% de triples que mantenía al descanso. Los altos porcentajes (y Langdon) comandaban hacia un amplio marcador: 47-44.

En el tercer periodo, el Partizan aplicaba un punto por encima su entramado defensivo lo que, combinado con la activación de Aleks Maric les permitía ponerse por encima. El tercer periodo había rebajado la diversión y aumentado la tensión competitiva, con menos puntos, más trabas y una ausencia de dominio que emplazaba a los minutos finales (61-62). El último periodo iba de alternativas, con caída de los porcentajes de tiro y un ambiente más de prefinal que de 3º y 4º puesto. La pérdida del atractivo visual de la primera mitad quería compensarlo la tensión de la igualdad, aunque la ausencia de premio dejara todas las sensaciones a medias. Los moscovitas se pusieron 75-72 en los últimos minutos, con guerra de tiros libres sin error hasta que lo hizo Khryapa, antes de que McCalebb se recorriera toda la pista para forzar la prórroga con una bandeja (78-78). De nuevo tiempo extra, el segundo de la Final Four. En ella, dañaron moralmente los triples de Kecman (16 tantos) y Bozic, aunque CSKA se repuso, de nuevo con Langdon y Khryapa. La tensión del final, sin perderse en los tiros libres, existía: Holden anotaba un triple a 2,4 del final (otro tiro a 2,4...) que volvía a cambiar el signo. McCalebb tuvo tiempo para armar un tiro que rebotó en el aro y ponía un broche de emoción en el tercer puesto del CSKA Moscú.