Lituania supera al efecto Penney y cumple los pronósticos (79-92)

Esmirna, 28 Ago. 2010.- Lituania abrió el Mundial en Esmirna con una victoria lograda en cinco minutos, los primeros del segundo cuarto donde logró culminar un demoledor parcial de 20-2 que rompió el choque.

Pese a la frialdad que siempre se le presupone al inicio de un campeonato, Nueva Zelanda y Lituania salieron al encuentro muy acertados y rompieron a anotar canastas desde el primer instante. El alto ritmo de partido beneficiaba a una Nueva Zelanda que sin juego interior (llegó a jugar con Pero Cameron como único pívot) sólo podía recurrir al descontrol y los triples como armas para evitar lo inevitable.

Inevitable porque Lituania terminó por ajustar su defensa y rompió el partido en el segundo cuarto (los kiwis no anotaron en los cuatro primeros minutos y encajaron un parcial de 2-20) y lo hizo con el contratiempo de la lesión de Robertas Javtokas al poco de iniciarse el partido y habiendo anotado un solo triple en la primera parte. Pero ese lanzamiento de tres de Linas Kleiza sobre la bocina ponía el 34-50 en el marcador y finiquitaba cualquier opción de sorpresa.

Muchos equipos hubieran abandonado antes de tiempo, pero Nueva Zelanda se encomendó a Kirk Penney (llegó a sumar 28 puntos en tres cuartos) para meterse en e partido y bloquear a una Lituania que llegó a sentirse incómoda con el 75-82 que llegó a tener. Por suerte, el equipo báltico cuenta para este campeonato con un Kleiza muy motivado (puntos) y con sus canastas acabó con la ligera sensación de agobio que pudo meter Nueva Zelanda en el cuerpo de los lituanos (79-92).