Esmirna,29 Ago. 2010.- Corría el minuto cinco del segundo cuarto cuando Francia buscaba romper el partido pero lo que rompió fue la canasta. Fue Nico Batum quien, en uno de los muchos mates que Francia logró, hizo que el aro venciese y se tuviera que detener el partido.
Era un contratiempo sí, pero el problema se alargó más de lo debido por las condiciones del pabellón. Y es que en el lado de la canasta rota no había otra de repuesto que se pudiera sacar la pista y la única que había, en la esquina contraria al lugar del incidente, no tenía red para el aro.
Al final 20 minutos de espera y, entre una nube de curiosos fotógrafos, los operarios del pabellón con ayuda del esparadrapo arreglaron lo que Batum rompió. Eso sí toda la jornada sufrió las penurias de un imprevisto no planificado y con soluciones de urgencia.
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El aro que dijo basta
Nicolas Batum protagonizó la anécdota del día al romper el aro de una canasta tras un mate suyo. Sin opciones de cambiarla, el partido estuvo parado más de 20 minutos hasta que se solucionó el problema
© Complicado arreglo del aro roto en Esmirna, en el Líbano - Francia (Foto Sonia Cañada)