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De Móstoles a Manchester (II)

En la primera entrega de este artículo Mateovic nos contaba como Sergio Lara llega a Inglaterra y se va introduciendo en el mundillo del basket inglés hasta integrarse en un más que interesante proyecto de formación en Manchester. En este capítulo conoceremos más detalles sobre dicho proyecto, así como la peculiar situación de nuestro deporte en el país del fútbol por excelencia

Sergio Lara en el centro donde trabaja
© Sergio Lara en el centro donde trabaja
  

Por Mateovic, 8 mayo 2002.-

Manchester Basketball Academy of Excellence

Las academias se ponen en marcha adoptando el modelo del fútbol, que a su vez se había importado de Francia. Son como canteras a la española, pero mejor organizadas: los chicos están allí desde los 9 a los 18 años y tienen profesores, tutores, psicólogos' No les falta de nada. Todos los clubes de la Premiership o de la Nationwide Division I tienen una y parece que están funcionando muy bien (Beckham, Owen, Gerrard, Heskey...). Hace un par de años se inauguró la primera de baloncesto, en Durham.

Nosotros vamos a abrir una en septiembre y va a estar en el nuevo polideportivo, a inaugurar pocos meses antes, situado en los terrenos de una de las escuelas con mayor renombre de Manchester (Whalley Range High School). De los dos millones de libras que cuesta el edificio, la escuela pone medio, nosotros un cuarto y el ayuntamiento financia el resto. ¿Y de dónde vamos a sacar ese dinero?, os preguntaréis. Ya lo tenemos: viene de John Amaechi. Resulta que 'Meech' no empezó a jugar hasta bien tarde, ya cumplidos los 17, siendo Joe quien lo descubriera. Nadie daba un duro por él, salvo el jefe, que dedicó horas interminables a su mejora. Al final, consiguió una beca para Penn State y después un buen contrato en el Panathinaikos, dinero que el jugador prometió dar a su 'coach', en su totalidad, como agradecimiento a los servicios prestados. Y así ha sido. Tres campos de baloncesto reglamentarios de parqué, gimnasio, sala de fisioterapia, otra de reuniones, restaurante... El John Amaechi Basketball Centre será impresionante y en él entrenarán, entre otros, todos los chicos de la academia que, por supuesto, jugarán para los equipos del club en sus correspondientes categorías.

El jugador inglés

Yo siempre he creído que el talento es una cosa natural; si no se posee, por mas que uno entrene no llegará a nada. Quiero decir que un entrenador no puede hacer que un niño tenga más talento, aunque sí que sea mejor técnica o tácticamente. El problema es que encontrar talento es una cuestión de número: si, digamos un 1% de los niños tienen talento deportivo, de 100 vas a sacar 1, etc., etc. Y comparándolo con España, aquí juegan al basket muchos menos niños. Por otra parte, hacen faltan mejores entrenadores, ya que al estar tan focalizado el tema (Manchester, Londres y poco más), muchos futuribles se pierden.

El baloncestista británico es, por lo general, malo técnicamente (si es negro), pero un atleta; o bueno técnicamente (blanco) y de físico aceptable. Ejemplos, Steve Bucknall (es el capitán de la selección, estuvo en North Carolina y jugó en los Lakers. Ahora anda en el Aris Salónica), Yorick Williams (también en el Aris e internacional), Andy Betts (es otro de los grandes), John Amaechi (en Utah Jazz), Darren Phillip (no es la pera, pero cumple para el Unicaja)... El problema del equipo nacional es que no tiene financiación y apenas se puede juntar a la gente para entrenar debido a los numerosos compromisos cada club europeo. Todo esto ha hecho que nunca se haya clasificado para ningún campeonato absoluto. Es una pena, porque seguro que eso le daría un buen empujón. Acordaos de Los Angeles'84.

Respecto a los jóvenes, ahora mismo hay unos cuantos en universidades americanas: el que más ha impactado es Michael Deng, un armario ropero de 2.02 metros, negro, que juega de 'tres' y tiene 16 añitos. Se rumorea que irá a la NBA sin pasar siquiera por la universidad. ¡Esta el número 6 de 'high school' de todo el país! Hace poco lo quiso un club ACB, aunque no estoy autorizado a decir cuál, no vaya a ser que'

El mayor problema que tienen aquí es que no hay quien les haga la competencia, por lo que no progresan hasta que emigran a América. Además, nadie aspira a jugar en la liga inglesa porque es una calamidad y todos lo saben. Este es otro contratiempo gordo del que os hablo a continuación.

La BBL

Una merienda de negros, nunca mejor dicho, o un montón de americanos mediocres ganando cuatro perras, entrenados por americanos mediocres ganando cuatro perras. Un desastre. El nivel físico es superior al de la LEB, pero la calidad es menor. Hay 16 equipos. Todos están a un paso de la bancarrota y algunos, como los Giants, quebraron a mitad de la presente campaña. Gracias a Dios, yo ya no trabajaba para ellos... No tienen cantera y la legislación sobre los extranjeros es muy peculiar: permiten 2 americanos y 3 foráneos que no necesiten permiso de trabajo (esto viola la ley Bosman, ¿no?). Total, que al final lo que tienen son cinco o seis yanquis, de los que cuatro son nacionalizados. Apenas hay jugadores ingleses en la liga, pues los que son buenos se van a jugar a Europa, donde les pagan más y el nivel es superior. No ponen los partidos por la tele. El único baloncesto que vemos es de NBA y muy de vez en cuando. En estas condiciones, es muy difícil conseguir que la juventud se enganche (¡ay, cuando veíamos a Trecet o a Gabaldá. Que Dios los bendiga!) Tampoco va mucha gente a los pabellones: diría que, como media, unos 800 ó 1000 espectadores. Y siendo optimista. Esta liga es independiente de la Federación Inglesa, que es la organizadora la NBL (donde juego yo, tipo EBA: un par de americanos regulares, pero fuertes, y ocho guerreros ingleses. Hay 12 equipos), la División II y luego las categorías inferiores a escala nacional. Todo lo que sea a nivel local depende de autoridades municipales, por eso no funciona, porque va en función de que algún chalado deje su trabajo para dedicarse a esto.

El futuro del basket aquí

Yo creo que es brillante debido al talento físico y a que cada vez participan más jóvenes. Ayudaría mucho que la primera categoría fuese más fuerte y con jugadores extranjeros, pero eso lo veo difícil. Lo ideal sería que los chicos de hoy tuvieran héroes como Herreros, Navarro, Gasol, Dueñas y demás en sus clubes locales y, por ello, no tuvieran que mirar siempre a la NBA o a Europa, con el añadido de que la selección compitiera en torneos oficiales. No obstante, en un plazo de entre 5 y 10 años las cosas habrán cambiado para mejor. No sé si tendremos una competición fuerte, pero seguro que producimos buenos jugadores en cantidades industriales. Avisados quedáis.

Y ya no sé por dónde seguir. Madre mía, si habéis aguantado hasta aquí' Tan sólo me gustaría daros las gracias (uno echa de menos el baloncesto español), haceros partícipes de mis últimas alegrías (nos hemos clasificado para la 'Final Four' de la NBL, me han nombrado seleccionador autonómico infantil, mis padres están a punto de llegar...) o contaros alguna que otra anecdotilla (cuando me presentan en los partidos de casa, ponen el 'Que viva España', de Manolo Escobar; nuestra ciudad más famosa aquí es Benidorm y de empresas, San Miguel; no saben dónde está Madrid, pero se saben la alineación completa de Atlético de Gil; a mis compañeros ya les he enseñado a jugar al mus y es la risa verles diciendo 'a grande, envido, órdago, farol, solomillo, veo, cinco mas...'; las madres de los niños me piden la receta de la paella...).

Lo dicho, un fuerte abrazo para todos.