Antonio Soto. Madrid, 27 ene. 2019 (EFE).- El Movistar Estudiantes frenó este domingo en seco la buena racha del Iberostar Tenerife en un partido vibrante, que se resolvió en la prórroga y que confirma la recuperación de un equipo que logró su tercer triunfo consecutivo en casa y se aleja de los puestos de descenso (98-96).
Los colegiales lograron llevarse a base de fe un choque que parecía perdido pero acabaron ganando gracias al cuarteto formado por Dario Brizuela (21 puntos), Alessandro Gentile (20), Shayne Whittington (18) y un gran Nik Caner-Medley (15 puntos, 13 rebotes y 29 de valoración) que puso fin a la racha de cuatro triunfos consecutivos de su rival.
Los locales salieron más entonados a la pista, con Whittington como principal estilete y la consigna de imprimir velocidad a sus ataques al ritmo que marcaba Brizuela. Con un 10-4 en contra, Txus Vidorreta se vio obligado a parar el partido antes de tiempo para ordenar el juego de su equipo.
A los tinerfeños le costaba ver aro mientras que Whittington, con diez puntos en poco más de cinco minutos, mantenía a los suyos por delante con cómodas rentas que llegaron a ser de ocho. Reaccionó a tiempo el Iberostar Tenerife con buenas acciones de Javier Beirán y Colton Iverson y dos triples de Pierre-Leon Gillet apretaron el choque al termino del primer cuarto (21-19).
Una jugada de 2+1 de Mamadou Niang en el primer ataque canario del segundo acto puso por delante por primera vez a los suyos, que empezaban a carburar coincidiendo con la aparición en ataque de Thad McFadden y tomaron el mando en el marcador con autoridad ante las dudas e imprecisiones que atenazaban a los madrileños.
Dos triples de Nico Brussino culminaron un parcial de 4-17 en seis minutos que encendió las alarmas en los estudiantiles. Josep María Berrocal paró el partido para intentar poner fin a la sangría y lo logró en parte, ya que tras un mal segundo acto su equipo se entonó al final y logró llegar con vida al descanso (32-40).
El despertar en ataque del italiano Gentile hizo soñar a los suyos con la remontada (43-47, min 26) aunque, cuando más cerca estaban de lograrlo, una serie de decisiones arbitrales muy protestadas por el público permitieron al Iberostar Tenerife volver a despegarse a base de tiros libres.
Gentile se echó al equipo a sus espaldas y tomó toda la responsabilidad en ataque, aunque enfrente tenía a un rival en buen momento de forma que no se descompuso en los peores momentos y supo llegar a los diez minutos finales por delante (51-59, min 30).
Con la estrella italiana de nuevo al mando de las operaciones, el Movistar Estudiantes lo siguió intentando, aunque remó demasiado solo en esa fase del partido frente a un equipo canario más compacto que buscaba su duodécimo triunfo del curso.
Dos triples del propio Gentile y de Whittington a seis minutos y medio del final dejaron en un solo punto la ventaja tinerfeña (61-62) y Caner-Medley puso, tras muchos minutos por debajo, a los colegiales por delante tras culminar un contraataque (69-68, min 36).
Los empates se sucedieron en unos últimos minutos de vértigo. A once segundos del final, Omar Cook subió el 79-79 al marcador con tres tiros libres y, en su última posesión, Davin White falló cerca del aro y llevó el partido a la prórroga.
En el tiempo extra, Iberostar Tenerife se mostró de inicio más certero ante un rival que pareció acusar el esfuerzo del último cuarto pero que supo despertar a tiempo comandado por Omar Cook para llevarse un partido frenético que confirma su recuperación.
98 - Movistar Estudiantes (21+11+19+28+19): Cook (9), Brizuela (21), Gentile (20), Caner-Medley (15) y Whittington (18) -quinteto titular-, Sola (-), Clavell (3), Hakanson (2), Vicedo (4), Suton (-) y Arteaga (6).
96 - Iberostar Tenerife (19+21+19+20+17): White (8), San Miguel (7), Beirán (16), Abromaitis (12) e Iverson (18) -cinco inicial-, Niang (3), Brussino (6), Bassas (8), McFadden (9) y Gillet (9).
Árbitros: Daniel Hierrezuelo, Jacobo Rial y Javier Torres. Eliminaron por faltas a Shayne Whittington y Alessandro Gentile.
Incidencias: Partido de la jornada 18 de la Liga Endesa disputado en el WiZink Center de Madrid ante 7.351 espectadores. Antes del partido se guardó un minuto de silencio por la jugadora del Olímpico y excolegial Loty Egusquiza, fallecida esta semana.