Barcelona, 16 Ene. 2016 (EFE).- El FIATC Joventut recibe este domingo en Badalona al Laboral Kutxa con el objetivo de sumar una victoria que mantenga vivas hasta la última jornada sus opciones de luchar por estar en la Copa del Rey.
Sin embargo, su trayectoria en los últimos dos meses con un triunfo en nueve partidos, y la entidad del rival, que llega al Olímpic en cuarta posición de la liga tras sumar cinco victorias consecutivas, no invitan al optimismo. El equipo catalán está más preocupado ahora mismo por recuperar su mejor línea de juego.
Al mal momento de juego de los de Salva Maldonado hay que añadir que los verdinegro no llegan al partido con su plantilla al completo, ya que el base Demond Mallet no jugará por una rotura fibrilar en el muslo derecho y Brandon Paul será duda hasta el último momento por un esguince en su tobillo derecho.
Maldonado tendrá que recurrir al base Agustí Sans y al alero José Ignacio Nogués como recambios de sus dos norteamericanos si finalmente se confirma la baja de Paul.
Con todas estas circunstancias en su contra, el conjunto de Badalona tendrá que hacerse fuerte, sobre todo en defensa, para plantar cara al segundo mejor equipo en ataque del campeonato, con una media de 88 puntos por encuentro.
La inconsistencia defensiva y la irregularidad del equipo catalán a lo largo de los partidos han sido las claves del declive del conjunto de Maldonado en los dos últimos meses de competición después de un prometedor inicio de torneo.
Sus problemas ante los pívots rivales han marcado los últimos partidos y mañana sus jugadores interiores deberán parar al mejor jugador de la liga, el pívot griego Ioannis Bourousis, que vuelve a la Liga tras perderse el último partido por la muerte de su suegro.
Sin Demond Mallet en el equipo, Albert Sabat tendrá que emplearse a fondo con la anotadora pareja de bases norteamericanos -Adams y James- e intentar que no logren imponer además el ritmo de juego del partido.
El exbaskonista Sergi Vidal tendrá que echarse nuevamente el equipo a la espalda y el resto de jugadores dar un paso adelante para intentar, como mínimo, que no vuelva a repetirse el partido del pasado domingo en la pista del Herbalife Gran Canaria (82-67).
La estadística dice que el Laboral Kutxa ha perdido en sus tres últimas visitas a Badalona y que históricamente ha sido una plaza que no se le ha dado bien a los vitorianos. La Penya ha ganado en 33 ocasiones, por 14 de su rival. Un partido acabó en empate.
El Laboral Kutxa visita este domingo la cancha del FIATC Joventut para reencontrarse con las buenas sensaciones de juego tras la derrota en la Euroliga ante el Khimki.
El conjunto vitoriano llega directo a Badalona desde Moscú tras un maratoniano viaje y rumiando su floja actuación de ayer, sobre todo en la segunda parte, que mermó las opciones de haber doblegado a los rusos con una catarata de balones perdidos, 19, y solo media docena de triples anotados de los 24 lanzados.
Habrá que esperar también a comprobar si Alberto Corbacho está en condiciones de jugar después de viajar a Moscú y no poder saltar a la cancha por la distensión en el aductor que ya le impidió también jugar la pasada jornada ante el ICL Manresa.
El Laboral Kutxa Baskonia espera retomar la buena senda del juego y resultados abrigado en la menor exigencia de la Liga Endesa. Ya ha certificado su presencia en la Copa del Rey de La Coruña el próximo mes como cabeza de serie y aspira a arrebatar al Real Madrid la tercera posición.
El duelo ante los verdinegros debe servir también para que jugadores como Darius Adams o Ioannis Bourousis retomen su mejor nivel.
El base ya encadena varios partidos en los que se le nota carente de confianza y no está pilotando al equipo con la brillantez del comienzo de competición.
El pívot griego tuvo su más floja actuación como baskonista en Moscú, con solo tres puntos, y estuvo ausente de la cancha durante muchos minutos.
Bourousis vuelve a la ACB tras no estar presente la jornada anterior debido al fallecimiento de su suegro y acudir a los funerales en Atenas.
