Erazem Lorbek: "Hay mucho baloncesto dentro de mí y debo estar en la pista"

Redacción, 26 Jul. 2016.- Erazem Lorbek volvió a pisar una pista de baloncesto hace tres semanas, en la liga de verano de Las Vegas. Fue un pequeño contacto, pero esos 6 minutos y 13 segundos con los San Antonio Spurs supieron a gloria después de un calvario de problemas físicos que le han impedido jugar un partido oficial desde la temporada 2013-14.

La lesión en una rodilla dejó mermado a Lorbek en su último curso con el FC Barcelona. Su cuerpo dijo basta en junio de 2014 y, desde entonces, el genio esloveno no había vuelto a jugar. Lorbek ha estado estos dos años recuperando su forma física y entrenando para regresar más fuerte que nunca. Y ahora, después de su participación en la liga de verano de Las Vegas, ha decidido romper el silencio en una entrevista para Team Scout. "El proceso de recuperación no fue fácil, pero nunca pensé en retirarme", reconoce el esloveno.

Lorbek recuerda cómo empezó todo. "Las lesiones son parte del juego, y la que yo tuve me molestó durante toda la temporada 2013-14 hasta el punto que no me dejaba jugar de la manera en que lo solía hacer", explica el ala-pívot. "Una vez acabada la temporada, me tomé un tiempo y empecé con mi recuperación. Quería volver a tener un cuerpo que me permitiera jugar mi estilo de juego, ser capaz de mostrar mi juego sin ningún tipo de limitación como las que había tenido los dos últimos años", reconoce el esloveno.

El campeón de la Euroliga en 2011 con el FC Barcelona recuerda que "desde que acabó la temporada, empecé a pensar en posibles soluciones y quería regresar con éxito". Han sidodos años, pero Lorbek asegura que "durante mi tiempo lejos de las pistas he trabajado muy duro y por suerte he tenido la gente correcta a mi lado, que me ha ayudado a volver a jugar como lo hacía antes de mi lesión".

La espera se ha hecho larga, pero el esloveno se ha preparado no solo para regresar, sino para ser capaz de mostrar una mejor versión. "No esperaba estar fuera de las pistas dos años, pero por otra parte quería estar cien por cien seguro de que podía volver. A la que pasaba el tiempo y veía todos los aspectos que necesitaba mejorar de mi juego, aspectos que antes no había tenido tiempo de trabajar, decidí prepararme de la mejor manera para convertirme en un mejor atleta y en mejor jugador de baloncesto", reconoce.

Y todo el trabajo hecho estos dos últimos años para regresar a la pista tuvo su recompensa hace tres semanas. "Una vez vi que estaba preparado para regresar, surgió la oportunidad de jugar este verano en la NBA Summer League de Las Vegas", explica Lorbek. El esloveno asegura que "ha sido una buena experiencia, he tenido la oportunidad de jugar en otro estilo de baloncesto con futuras estrellas y he aprendido nuevas cosas que me ayudarán". Aunque, lo más importante para el jugador, fue el hecho de volver a estar en una pista. "Me dio esperanza y motivación para continuar hacia adelante", reconoce.

El regreso en Estados Unidos le ha confirmado algo que llevaba tiempo esperando. "No creo que tenga ningún problema o limitación por mi lesión. Estoy preparado para volver a jugar, puedo entrenar duro. Seré el mismo jugador de antes, si no incluso mejor", reconoce Lorbek. Ahora, a los 32 años, el esloveno está preparado para volver a escribir su propia historia. Para convertirse de nuevo en uno de los interiores más dominantes de Europa.

"El baloncesto ha evolucionado, ahora se juega más rápido, pero estoy preparado. Durante la recuperación trabajé este aspecto. El tipo de juego que se practica ha cambiado pero mi inteligencia en el juego sigue siendo la misma", asegura Lorbek. El esloveno añade que "ahora mismo solo estoy centrado en trabajar duro y mejorar para estar preparado para la próxima temporada. Esta es mi preocupación, y no pensar qué equipo me iría mejor. Mi agente se encarga de ese aspecto".

Dos años de inactividad, trabajando para regresar a la pista, no le han impedido a Lorbek, de 32 años, que vuelva y que se ilusione por ser importante otra vez. "Pienso que aún puedo jugar cinco años más, aunque intentaré hacerlo lo máximo que pueda porque me encanta el baloncesto y aún tengo mucho que dar pero también que aprender. Aún hay mucho baloncesto dentro de mí y creo que debo estar en la pista", sentencia el esloveno.