Convicción canaria. El Gran Canaria Grupo Dunas sigue apelando a lo que nadie ha conseguido: remontar un 2-0. Una vez más el equipo isleño estaba contra las cuerdas, 11 abajo a falta de seis minutos, pero nunca dejó de creer: apretó en defensa, aceleró en ataque, forzó la prórroga y ganó en ella. Es el 2-2, y ahora los isleños tratarán de seguir escribiendo historia remontando un 2-0 por primera vez en la historia en un Playoff por el título (sólo se ha dado la vuelta a un 0-2).
Savané: nervios de acero. El pívot senegalés afrontó un durísimo y exigente reto: dos tiros libres con el reloj a cero y 63-65 en el electrónico. Una rápida mirada a las estadísticas señalaba 65/89 hasta ese decisivo momento, pero a Savané no le tembló la mano y tras su formidable rebote ofensivo logró igualar el encuentro ante el júbilo de su afición.
Pasión en el tiempo extra. Cinco minutos de añadido al espectáculo y la igualdad del encuentro, manteniendo la igualdad sin ventajas importantes. Decidieron dos tiros libres de Kornel David a 10 segundos del final, pues Paco Vázquez erró el lanzamiento que hubiera llevado el encuentro a la prórroga. Y es que el DKV Joventut, con varias bajas, apeló a la épica, jugando el último 1:50 con Barton de 5 y acompañado por Bennett, Paco Vázquez, Laviña y Rudy Fernández. Las faltas no dejaron mucha más alternativa a Aíto.
Rudy asume los galones. El escolta estaba viviendo una durísima eliminatoria, perfectamente defendido y sin posibilidad de imponer su talento y conducir al DKV Joventut a las semifinales, pero finalmente logró explotar en Las Palmas de Gran Canaria, si bien no pudo conducir a su equipo a la clasificación. Rudy Fernández asumió los galones, marcó diferencias desde el comienzo (9 puntos en el primer periodo, 15 al descanso) y se convirtió en el factor diferencial que necesitaba la Penya para avanzar.
Jimmie Hunter se echa el equipo a la espalda. El escolta estadounidense hizo otro partido sensacional, asumiendo el papel de referente canario en la gran remontada del último periodo. Hunter empezó su exhibición en el minuto 28, con cuatro puntos en la recta final del tercer cuarto, añadiendo otros nueve para conducir al equipo al tiempo extra. Y ya luchando en los últimos minutos, culminó su partidazo con tres tiros libres. Al final, 23 puntos (16 tras el descanso) y enorme carga de liderazgo.
Vroman, sólo contra el peligro. Ocho minutos. Ése es el tiempo que tardó el Gran Canaria Grupo Dunas en encontrar en el tercer cuarto una referencia ofensiva diferente a Jackson Vroman, que había anotado todos los puntos de su equipo durante ocho largos minutos. Y es que por mucho que valiesen sus nueve tantos y su incansable esfuerzo bajo tableros, sólo una vía de anotación es demasiado poco para un partido de esta exigencia. Y como no podía ser de otro modo, el DKV Joventut lo aprovechó para abrir hueco: de 29-32 a 38-47.
Vida dura sin Gaines. El DKV Joventut sufrió en exceso la baja de Charles Gaines, padeciendo una escabechina en el rebote defensivo: el Gran Canaria Grupo Dunas capturó 22 rechaces en el aro verdinegro, ganando claramente esa batalla. Aíto, que arrancó con Barton como 4 titular, tuvo que recurrir a Sullivan ante la rápida eliminación de Flis y vio acrecentar sus problemas con la acumulación de faltas de Betts y Archibald, que acabaron eliminados.
Flis duró sólo 6:32. El joven ala-pívot ruso Dmitry Flis afrontaba en Las Palmas una oportunidad única en su carrera: la lesión de Gaines le ofrecía un protagonismo inusitado en Playoff... y lo desperdició. En sólo 6:32 cometió cuatro faltas personales y una técnica para autoeliminarse con el único bagaje positivo de dos rebotes, completando un 6 de valoración.
