Artículo

Regal Barça: Ndong y Mickeal provocan una revolución en seis minutos

Pete Mickeal y Boni Ndong comandaron un espectacular cambio en el Regal F.C. Barcelona, que pasó de estar al borde de la derrota... a lograr un parcial 11-0 con Mickeal como líder en ataque y Ndong ejerciendo de comandante en una memorable defensa

Pete Mickeal, determinante (Foto Euroleague/Getty)
© Pete Mickeal, determinante (Foto Euroleague/Getty)
  

Redacción, 23 Mar. 2010.- Cuando a falta de seis minutos para el final, el Real Madrid ganaba por 57-60 al Regal F.C. Barcelona, la sorpresa parecía muy posible en el Palau Blaugrana, testigo de 12 cambios de liderazgo.

El favorito titubeaba ante un rival crecido, y sólo había dos respuestas posibles: hundirse moralmente o crecerse. Y este Regal Barça hizo lo segundo, a lo grande: parcial 11-0 y victoria ante un Real Madrid destrozado.

Los blancos se toparon con una muralla defensiva, con un Regal Barça que convirtió en oscuridad todo lanzamiento del cuadro madrileño. Cada vez que se levantaban los Llull, Prigioni, Jaric y compañía se encontraban con los intimidadores brazos de Ndong y una actividad defensiva sobrenatural. La consecuencia fue un 0/5 en tiros de dos y 0/3 en triples y tres pérdidas de balón en seis minutos de muro infranqueable.

Colosales Mickeal y Ndong

Dos jugadores cambiaron el signo del partido: Pete Mickeal y Boniface Ndong, autores de 15 de los 17 puntos blaugrana en el último periodo.

Mickeal encendió la chispa cuando el Regal Barça caía por 57-60. Entonces asumió el control, con su serenidad habitual, para anotar ocho puntos sin fallo (dos triples y una canasta segundos después de un importante rebote ofensivo) y cambiar radicalmente el encuentro. Y es que no fue sólo pasar de 57-60 a 65-60, crítico ya de por sí, sino que cambió la mentalidad y el aspecto total del choque.

Pero para llegar hasta ahí tenemos que buscar a Boni Ndong, un hombre que se dejó la vida sobre el parqué y que, al término del encuentro y cuando era entrevistado por C33, sudaba tanto que parecía haber salido de la ducha. Suyos fueron los seis primeros puntos blaugrana del cuarto y luego, un tiro libre y dos rebotes y dos tapones claves, además de su tremenda intimidación. “Hemos trabajado muy bien, hecho un esfuerzo importante; el Real Madrid es un buen equipo y no podemos bajar la mano”, acertaba a decir Ndong en C33, exhausto pero siempre con una sonrisa.