De Djordjevic a Teodosic

Redacción, 8 Sep. 2010.- Estambul acogió en 1992 una de esas canastas más increíbles de la historia del baloncesto europeo de clubes, un desenlace de libro... si no lo sufres.

En Badalona nunca olvidarán cómo Sasha Djordjevic, aun con pelo, se recorría toda la pista a la carrera para lanzar en movimiento, girándose en el aire, para anotar el triple de la victoria a 3 segundos del final.

Fue un triple inverosímil, imposible. Y 18 años después, volvió a pasar de la mano de su mejor discípulo, el joven Milos Teodosic. Esta vez con la selección Serbia y desde una posición completamente diferente (a 9 metros, central), pero castigando de forma dura al baloncesto español. A la selección y en un Mundial, nada menos.

Al emular a Djordjevic, Teodosic se ha unido a la lista negra de España, a esa breve lista de villanos que han impedido el avance de nuestro baloncesto en los segundos finales de un partido trascendental. Por ejemplo:

J.R. Holden, Rusia (Eurobasket 2007). España debía ganar su Eurobasket y era el claro favorito en la final contra Rusia. Con 59-58, Holden fintó, Calderón saltó y el tiro del “ruso” botó dos veces en el aro antes de entrar a 2,4 segundos. El lanzamiento desesperado de Pau Gasol no entró y Rusia se llevó el título.

Dirk Nowitzki, Alemania (Eurobasket 2005). España jugaba sin Pau Gasol pero con el mejor Navarro, y tras una gran remontada se llegó a los últimos segundos con ventaja española de un punto. Entonces, decidió Nowitzki con un tiro lateral desde cuatro metros, hundiendo la esperanza española. La Selección quedaría tan hundida que perdería la lucha por el bronce.

Stojan Vrankovic, Panathinaikos (Euroliga 1996). Esta vez no fue una canasta, pero sí la acción defensiva más amarga y protestada de la historia del baloncesto español de clubes. Y es que el Barcelona había remontado en la final y perdía por 67-66 cuando Montero avanzó hacia la bandeja... para recibir un tapón de Vrankovic, pívot del Panathinaikos. El tapón fue claramente ilegal pero fue señalizado como válido y el Barça tardó siete años más en ganar su primera Euroliga.

Christian Welp, Alemania (Eurobasket 1993). España era la favorita en aquel Eurobasket, pero en cuartos de final contra la modesta selección anfitriona llegó el gran chasco: Azofra falló un tiro libre y el pívot Welp anotó una canasta sobre la bocina, en carrera desde cinco metros, dejando el 77-79 final. Alemania ganaría el título.

Menos mal que siempre nos quedará el no-triple de Nocioni...