Redacción, 8 abr. 2008.- Llegó el momento de la verdad para el TAU Cerámica, que se juega a cara o cruz su continuidad en la Euroliga y la oportunidad de hacer historia consiguiendo por cuarta vez consecutiva estar presente en la Final Four de la máxima competición europea.
Para ello tendrá que conseguir un nuevo triunfo en el tercer y definitivo encuentro del Playoff de cuartos de final ante el Partizan, al que llegan después de hacerse con la victoria en el partido que abrió la serie y caer en el segundo disputado en Belgrado.
Después de una gran trayectoria en el torneo, el conjunto de Neven Spahija se enfrenta a la prueba más dura y ante un rival que ya ha dado muestras de su calidad, por lo que los baskonistas no podrán despistarse si no quieren llevarse un disgusto.
A rubricar una gran temporada europea
Para llegar hasta aquí, el TAU Cerámica ha recorrido un largo camino en el que ha ido superando con nota cada fase del campeonato.
Así, finalizó tercero la temporada regular, tras lograr nueve triunfos y ser únicamente superado en la clasificación por el todopoderoso CSKA Moscú (1º con 12 victorias) y Montepaschi Siena (2º, 10), único equipo que ha logrado el pase a la Final Four de Madrid hasta el momento.
Ya en el Top16, el conjunto vitoriano fue el mejor equipo, al conseguir cinco victorias y una única derrota, finalizando como líder del grupo E, lo que le otorgaba la ventaja de cancha para el Playoff de cuartos, en el que se enfrentaría con el segundo clasificado del grupo D.
Partizan, de menos a más
Y si hay un equipo que se puede considerar sorpresa a estas alturas de competición, ese es sin ninguna duda el Partizan. El equipo de Belgrado ha seguido una trayectoria claramente ascendente que le ha llevado a dejar en la cuneta al todavía vigente campeón y a poner contra las cuerdas a uno de los equipos más potentes de Europa, el TAU Cerámica.
En esta decisiva fase, llegó con opciones de clasificación a la última jornada, en la que se jugaba el pase ante el todavía campeón, el Panathinaikos. El equipo de Zeljko Obradovic sufrió en carne propia el terrible ambiente que se vive en el Pabellón Pionir, siendo derrotado en ese último partido y quedando así sin opciones de defender el título conquistado en Atenas la pasada temporada.
Dos versiones muy distintas en cuartos
Los dos encuentros disputados hasta el momento por TAU Cerámica y Partizan han tenido dos guiones bien diferenciados.
En el primer choque, disputado en Vitoria, los hombres de Spahija se impusieron por una diferencia de ocho puntos (74-66), después de un choque muy duro e intenso ante un rival que demostró todo su potencial.
Los vitorianos tuvieron en el buen hacer de Zoran Planinic a su mejor baza, así como a la gran defensa desarrollada, especialmente en la segunda parte.
Con medio billete para Madrid en el bolsillo, el TAU viajó a Belgrado dispuesto a sentenciar la serie, pero muy al contrario, sufrió una abultada derrota (76-55) después de ser superado de principio a fin por el Partizan.
Con un excelente trabajo defensivo, que dejó a los vitorianos en sólo siete puntos en el último cuarto, el conjunto serbio fue fraguando un triunfo que tuvo como principal protagonista a Nikola Pekovic.
En el conjunto serbio, además del ya mencionado Pekovic, una de las grandes sensaciones de la temporada en la Euroliga, cabe destacar como hombres importantes a su base Milt Palacio, a Novica Velickovic, un jugador muy agresivo y con un gran lanzamiento de 6,25, o a Milenko Tepic.
Ahora, ambos conjuntos se enfrentan con un mismo y claro objetivo: conseguir ese ansiado billete para la Final Four.
Por lo visto hasta ahora, las fuerzas están muy equilibradas, por lo que los baskonistas tienen que afrontar el choque con la máxima concentración y dispuestos a darlo todo desde el inicio.
Además, de nuevo, el apoyo de la afición del Buesa Arena debe ser otro de los puntos a favor para el TAU Cerámica, que se enfrenta a una nueva oportunidad de hacer historia en la competición, consiguiendo el pase a la Final Four por cuarta temporada consecutiva.