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La casta mete al Tau en la final (51-56)

El Tau Cerámica dio la gran sorpresa de la Copa del Rey al derrotar al anfitrión y favorito Pamesa Valencia por 51-56, un marcador pírrico que no contempla la intensidad y emoción de un partido vibrante en el que acabó decidiendo la casta de los vitorianos, convencidos como nadie de sus posibilidades

Thierry Gadou ha sido el mejor del Tau Cerámica
© Thierry Gadou ha sido el mejor del Tau Cerámica
  
  • Estadísticas del partido



  • Thierry Gadou, récord de recuperaciones

  • Rueda de prensa de Paco Olmos

  • Rueda de prensa de Dusko Ivanovic

  • Declaraciones postpartido jugadores


  • Valencia, 22 Feb. 2003.- El Tau Cerámica llegó a la Copa del Rey 'in extremis', cargado de problemas y sin aparecer en ninguna quiniela de favoritos. Pero este Tau, campeón de Liga y Copa, es mucho Tau y así lo refrendó en otra extraordinaria victoria: 51-56.

    Enfrente estaba el Pamesa Valencia, unánime favorito, anfitrión y, sí, mermado por la baja de Abbio, pero con un juego interior que debía haber arrollado a un Tau cogido con alfileres dentro de la zona. Pero no, los de Ivanovic obviaron sus problemas, jugaron sin ningún complejo y, sobre todo, creyeron en sí mismos.

    Y así llegó un triunfo inesperado y que se añade al ya amplísimo listado de heroicidades del cuadro vitoriano. Si se quiere personificar, buscar un 'MVP', y al lector no le vale Ivanovic, éste bien podría ser Thierry Gadou. El francés, que acumula una valoración de '7 en la Liga ACB, hizo de todo, y todo bien: defensa, ataque... convirtiéndose en el artífice del triunfo.

    Junto a Gadou habría que reseñar a un fantástico 'Torito', cuya cornada, en forma de demoledores triples, resultó mortal para un Pamesa Valencia que sufrió el primer gran chasco en una temporada hasta ahora formidable. El cuadro taronja lo intentó todo, pero le pudo la presión... y un rival ambicioso y convencido de sus posibilidades.

    El Tau Cerámica tardó en arrancar (tres minutos y medio sin anotar), pero en cuanto acabó con la sequía heló a la afición valenciana, convencida (como casi todo el mundo) de la superioridad del Pamesa Valencia. Sin embargo, una excelente defensa del Tau 'Gadou, extraordinario- a los arrolladores pívots taronjas, y a un Rodilla convertido en sombra del de cuartos de final, y el acierto de los siempres incisivos Nocioni y Scola permitieron al Tau conseguir un parcial 6-21 y doblar por momentos a su rival: 13-26, minuto 13.

    El Pamesa Valencia, tenso y desacertado, no conseguía revertir la situación ni utilizando una zona de ajustes ni realizando constantes rotaciones. Tampoco Hopkins podía mejorar el desacierto de Tomasevic y Oberto (-5 de valoración en el primer cuarto), ni siquiera ayudar al equipo a mejorar en el rebote.

    Lo que si cambió el panorama del partido fue la acumulación de faltas en los hombres importantes del Tau: Thierry Gadou, el mejor de los primeros minutos, y Nocioni cometieron su tercera falta mediado el segundo cuarto. Palladino tomó el relevo anotador y el Pamesa seguía saliendo a punto por minuto (17-30), pero el Pamesa Valencia se fue arriba en el momento de entrar Lewis Sims, quien no pudo emular a Gadou y fue superado por Oberto, líder de un parcial 9-0 que dio al Pamesa Valencia renacidas esperanzas al descanso: 26-30.

    El Pamesa Valencia salió del descanso con el mismo desatino de la primera mitad (26% en tiros de campo) y, aunque había mejorado el juego interior, no podía frenar al acertadísimo Palladino; cuatro triples del 'Torito', dos de ellos consecutivos, lanzaron al Tau, que llegó a los últimos nueve minutos con una importantísima ventaja: 41-52.

    Los de Olmos demostraron entonces que también saben remar contra corriente. Regresaron a individual y se metieron de nuevo en el partido al conseguir un parcial 6-0 que permitió que se llegase a los últimos cinco minutos con un 47-52.

    La defensa valenciana dejó al Tau Cerámica en apenas un punto en más de ocho minutos de juego, pero el Pamesa no pudo aprovecharlo, llegando a situarse sólo dos puntos por debajo (51-53) pero fallando los tiros que hubieran significado ponerse por delante, o al menos un empate. Un triple errado por Rodilla a falta de 19 segundos y dos tiros libres del hasta ese momento desacertadísimo Foirest fueron la sentencia definitiva.

    Pablo Malo de Molina
    ACB.COM