Casademont Girona intentará frenar a un Unicaja lanzado

Redacción, 11 Abr. 2003.- Unicaja recibe al Casademont Girona con el objetivo de sumar la que sería su séptima victoria consecutiva, confirmando así la importante mejoría exhibida en los últimos partidos.

Y es que el equipo entrenado por Bozidar Maljkovic se ha sobrepuesto a los problemas y las ausencias de hombres interiores para fortalecer su defensa y conseguir importantísimas victorias ante rivales tan directos como el F.C. Barcelona, al que se impuso por 65-68, poniendo fin a 10 meses de imbatibilidad como local. Tras esta buena racha, el equipo malagueño se ha alejado del cuarto clasificado y acercado a la cabeza: Barça le aventaja sólo en dos triunfos y Pamesa Valencia en uno, si bien tiene el basket-average perdido con ambos.

Para este encuentro Maljkovic podrá contar con todos sus hombres, a excepción del ala-pívot polaco Adam Wojcik. Cabezas, Okulaja y Weis, tocados por diferentes problemas físicos, se han repuesto y podrán actuar ante el Casademont Girona, con lo que el juego interior de los andaluces ya no se verá tan indefenso como en los últimos compromisos.

El rival de Unicaja será un Casademont Girona excesivamente irregular a domicilio. El cuadro catalán se ha visto implicado en la peligrosa lucha por evitar el descenso, si bien ha obtenido cierta ventaja al conseguir dos triunfos vitales ante Ricoh Manresa y CB Granada. De todos modos, el Casademont no puede relajarse y debe seguir luchando por alejarse del peligro.

El gran protagonista del encuentro será Darren Phillip, que pertenece al Unicaja pero se encuentra cedido en el Casademont Girona. A buen seguro el pívot inglés tratará de agradar y liderar a su equipo a un triunfo sorprendente. No contará con la ayuda de otro ex de Unicaja, Veljko Mrsic, quien se encuentra lesionado.

El técnico del Casademont Girona, Juan Llaneza, cree que su equipo está en condiciones de obtener una victoria mañana en la cancha del Unicaja, atendiendo a "las buenas sensaciones" que ofrecen sus jugadores.

"Sabemos lo complicado que es jugar en Málaga", comentó el entrenador del equipo gerundense, quien también tiene claro que un peligro real de su rival es el juego interior. "Sus pívots tienen una gran capacidad atlética y son muy hábiles en el rebote, tanto ofensivo, cómo defensivo".

Ante este juego, el Casademont debe hacer valer su solidez defensiva y en el dominio en el rebote bajo su aro. "Intentaremos que nuestros hombres interiores puedan correr en las transiciones y frenar el juego exterior de Unicaja", dijo Llaneza.