Redacción, 15 Jun. 2003.- Los aficionados del F.C. Barcelona tienen el privilegio de poder contemplar cada semana a Dejan Bodiroga y Gregor Fucka, dos jugadores sin igual en Europa. Llegaron este verano desde lugares tan diferentes como Atenas y Bolonia, pero su pasado es común: estuvieron cinco años juntos en el Stefanel, primero en Trieste y luego en Milán.
Allí, en el regazo de un maestro como Bogdan Tanjevic, dieron los primeros pasos de su carrera hacia el estrellato. Llegaron siendo casi unos niños y apenas unos años después eran ya jugadores determinantes por los que suspiraban los grandes clubes del continente. Su eclosión fue tal que llevaron a un club modesto como el Stefanel al título de la Lega en la temporada 1995/96 y a tres finales consecutivas de la Copa Korac.
Gregor Fucka llegó en 1990, con 18 años y apenas 2,06 metros. Tras muchas conversaciones, Tanjevic consiguió convencerle para que recorriese de manera definitiva los escasos 80 kilómetros que hay entre Liubliana, donde jugaba con el Olimpia, y Trieste, donde había nacido su padre. Obtuvo el pasaporte italiano y empezó a despuntar a la vez que continuaba creciendo. Estaba muy delgado, mucho más aun que ahora, lanzaba a canasta con las dos manos por igual y jugaba principalmente de alero.
Dejan Bodiroga tuvo un inicio más difícil. Su protector, el gran Kresimir Cosic, le sacó del Zadar croata para llevarle junto a Dragan Tarlac a Grecia. Una prueba con el AEK, otra con el Olympiakos, ambas satisfactorias, y la posibilidad de hacer carrera si se nacionalizaba griego. No aceptó, el Olympiakos se quedó con Tarlac y él probó fortuna en Trieste, con Tanjevic. Prueba superada y unos meses entrenando con el equipo antes de dar el salto en la temporada 1992/93.
Entonces, con apenas 19 años, se convirtió en el extranjero más joven de la historia de la Lega. Y en una de las sensaciones de la temporada merced a su extraordinario rendimiento. 'Fue un gran reto y una difícil apuesta de Tanjevic, que confió en los jóvenes', recuerda Bodiroga, quien pese a su juventud demostró 'que sabía jugar e hice una buena temporada'. 'Una de las mejores que ha hecho', señala Tanjevic, que tiene las estadísticas de su lado, pues el imberbe Bodiroga logró promedios de 21,2 puntos, 5,3 rebotes y 1,4 asistencias.
En sus inicios, y pese a su espectacular capacidad anotadora, Dejan Bodiroga actuaba de base. 'Tenía grandes dotes de organizador gracias a su lectura del juego y su personalidad', explica el técnico balcánico, quien le llegó a bautizar como 'el Magic Johnson europeo'.
Bodiroga y Fucka destacaban por su calidad y juventud, pero también por su ética de trabajo. Se pasaban horas y horas entrenando su tiro y fundamentos individuales, algunas veces hasta términos prácticamente obsesivos. 'Trabajaron con muchísimo entusiasmo y respeto, con deseo y voluntad de seguir mejorando', les halaga Tanjevic.
Con la progresión de la estelar pareja y el fichaje de Gentile, el Stefanel Trieste progresó a pasos agigantados. Finalizó tercero de la Lega en la temporada 1993/94 y llegó hasta la final de la Copa Korac, donde se estrelló contra el PAOK de Prelevic, Walter Berry y Savic. En la ida, 75-66 en Salónica, Bodiroga hizo uno de los peores partidos de su carrera: 6 puntos con 1/14 en tiros de campo.
El Stefanel cambió de sede en 1994, trasladándose a Milán. Allá fueron Tanjevic, Bodiroga, Fucka y compañía. En su primer año en la ciudad lombarda, el Stefanel alcanzó nuevamente la semifinal liguera y la final de la Copa Korac. Bodiroga estuvo bien, pero Alibegovic decantó la balanza del lado del Alba Berlín. No hay dos sin tres, y el equipo italiano se quedó en la temporada 1995/96 a un solo punto del ansiado título de la Korac. Los 33 puntos de Bodiroga y 32 de Fucka entre la ida y la vuelta no pudieron evitar que el Efes Pilsen conquistase el primer título europeo de la historia del baloncesto turco.
Esas tres finales perdidas habían granjeado a Bodiroga una injustísima fama de perdedor, de la que empezó a desprenderse meses después con un sorprendente título de la Lega que el serbio encarriló con una canasta ganadora sobre la bocina del tercer partido de la final ante el Teamsystem Bolonia. El Stefanel, que finalizó quinto en la Liga Regular, superó anteriormente a Cagiva Varese y Buckler Bolonia con destacadas actuaciones de Bodiroga.
Tras el título, Dejan Bodiroga puso punto final a su etapa en el Stefanel y firmó por el Real Madrid, para luego fichar por Panathinaikos y, el pasado verano, F.C. Barcelona. Gregor Fucka se quedó un año más en Milán, pero la pérdida de potencial del equipo le hizo cambiar de aires y fichar por el que fue su club hasta el pasado verano, el Fortitudo Bolonia.
'Fue una época muy bonita', recuerda con nostalgia Dejan Bodiroga. También Bogdan Tanjevic tiene especial cariño por aquella etapa en el Stefanel: 'fue mi último gran proyecto, llevamos el equipo desde la B1 (tercera división) hasta el título de liga con un grupo de jóvenes jugadores que luego serían estrellas'. No es de extrañar que Tanjevic se sienta 'orgulloso cada vez que Bodiroga y Fucka ganan algo, como la Euroliga con el F.C. Barcelona, ya que me siento como de la familia, como un hermano mayor'.
Pablo Malo de Molina
ACB.COM