Brasilia, 6 jun. 2004 (EFE).- "Fue una cosa linda y fantástica, un partido que me gustaría disputar al menos una vez por semana, pero que infelizmente no se puede porque tiene que ser sólo una vez en la vida", declaró a periodistas el también conocido como "Mano Santa".
Pese a esa ponderación, el ex jugador del club español Fórum Valladolid y de los italianos Caserta y Pavía tal vez sea uno de los atletas que más ha anunciado despedidas, decisión que hasta hoy pudo postergar con alguna justificación.
El deportista de 46 años, quien en 2001 arrebató del estadounidense Kareem Abdul-Jabbar el título de jugador que más tantos encestó en su carrera en todo el mundo, había asegurado que se jubilaría al final del torneo siguiente, en mayo de 2002.
Las entradas de los juegos en la que prometía ser su última temporada fueron disputados por los aficionados casi que a sopapos, lo que no lo impidió de que declinase de esa decisión al final de ese campeonato y postergarla hasta el fin de la disputa de 2003.
En abril pasado, tras haber participado en diciembre en un partido amistoso con ex compañeros suyos en Italia, ocasión en la que se suponía que abandonaba las canchas del baloncesto profesional, anunció que todavía le faltaba un último juego.
El gigante "llorón" de 2,05 metros, 106 kilos y un número 48 de calzado, que suele verter "cataratas de lágrimas" cuando se emociona, justificó que tenía que "despedirse" de las canchas de la capital brasileña, donde inició su carrera.
Schmidt pudo cumplir ese sueño acompañado del equipo con el cuál venció por 120 a 115 a la selección de baloncesto de Estados Unidos en la final de los Juegos Panamericanos de Indianápolis (1987), una derrota sin precedentes con la que el país norteamericano sufre hasta hoy.
Las 4.000 personas que acudieron al gimnasio del Colegio Marista, institución en la que la ex estrella de la selección brasileña estudió, pudieron ver al grupo campeón de la disputa panamericana de 1987 derrotar por 92 a 64 a un combinado de jugadores amigos de Schmidt.
Nota de agencia
Oscar Schmidt cierra de forma definitiva su vida en baloncesto
El brasileño Oscar Schmidt, uno de los más importantes jugadores de baloncesto en el mundo y cuyo nombre figura en el Salón de la Fama en Estados Unidos, se despidió hoy de forma definitiva de ese deporte en un "partido-homenaje" celebrado en Brasilia
