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Albert Oliver, el adiós de la leyenda más longeva

El hasta ahora base de Monbus Obradoiro pone fin, con casi 44 años, a la carrera más larga de la historia de la Liga Endesa

acb Photo / M. Henríquez
© acb Photo / M. Henríquez
  

Justo al día siguiente de que Monbus Obradoiro confirmara su permanencia en la Liga Endesa, Albert Oliver anunciaba su retirada como jugador profesional después de 24 años, 6 meses y 23 días en la élite.

El base de Terrassa cuelga las botas tras 8.973 días en activo, récord histórico de la liga, y a un mes de cumplir los 44 años, convirtiéndose también en el jugador nacido en España más veterano en jugar un partido de Liga Endesa. Y con creces.

Ambos hitos parecían totalmente inalcanzables cuando los logró el mismísimo Joan Creus con 42 años y casi 5 meses, y tras una legendaria carrera profesional de 8.609 días, sumando su etapa de liga nacional. Pero en 2011 Darryl Middleton pisó la pista de la Fuente de San Luis al borde los 45 años, rompiendo el tope establecido por Mike Higgins la temporada anterior, y ahora termina una trayectoria de casi cinco lustros.

TRAYECTORIAS MÁS LONGEVAS EN LIGA
Jugador Debut Último partido Días
Albert Oliver 19/10/1997 14/05/2022 8973
Joan Creus 20/09/1975 16/04/1999 8609
Rafa Martínez 09/10/1999 14/05/2022 8253
Felipe Reyes 04/10/1998 04/04/2021 8218
Álex Mumbrú 06/09/1997 24/05/2018 7565
JUGADORES MÁS VETERANOS
Jugador Edad Equipo
Darryl Middleton 44 años, 9 meses y 22 días Power Electronics Valencia
Albert Oliver 43 años, 11 meses, y 10 días Monbus Obradoiro
Mike Higgins 43 años, 1 meses, y 17 días Xacobeo Obradoiro
Joan Creus 42 años, 4 meses y 21 días TDK Manresa
André Turner 42 años, 2 meses, y 1 días Llanera Menorca

Así pues, Oliver esperó a cumplir el objetivo de su equipo, la permanencia, para hacer público el fin de la carrera más longeva que ha visto nunca la máxima competición española de baloncesto.

Simbólico, como el hecho de conseguir la salvación del Monbus Obradoiro en el Palau d'Esports de Badalona, el mismo escenario donde debutó el 19 de octubre de 1997, y ante su primer equipo, la Penya. Para luego cerrar su trayectoria profesional en su última casa, el Fontes do Sar, ante el primer rival al cual se enfrentó en acb, el Valencia Basket. Equipo, por cierto, en el que también militó.

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Colofón ideal para un jugador incombustible que, ya superados los 35 años, aún no ha había vivido sus mayores logros. Con 36 juega la primera final europea de la historia del Gran Canaria; con 37 queda subcampeón de la Copa del Rey de A Coruña siendo el máximo anotador de la final; con 38 gana la Supercopa e iguala su tope acb de asistencias; con 39 es convocado por primera vez con la selección española absoluta y con 40 debuta en Euroliga.

De hecho, cuando Albert Oliver se estrena en la máxima competición nacional en 1997 aún no habían nacido, ojo, nacido, uno de cada cuatro jugadores participantes de la Liga Endesa 2021-22. Entre ellos, su compañero Fernando Zurbriggen, por un solo día, o el actual MVP Dzanan Musa.

De Lleida a Manresa, pasando por Valencia Basket, Estudiantes, retorno a la Penya, Gran Canaria, Betis y finalmente Obradoiro. A través del talento y la ética de trabajo, una condición genética especial y una pizca de suerte para evitar grandes lesiones, el ya retirado base ha llegado a destacar en distintos rankings históricos de la competición.

Jugador Temporadas
1 Felipe Reyes 23
2 Albert Oliver 22
3 Álex Mumbrú 21
= Rafa Jofresa 21
= Sergi Vidal 21
4 Juan Carlos Navarro 20
= Fernando San Emeterio 20
= Nacho Rodríguez 20
= Pablo Laso 20
Jugador Asistencias
1 Pablo Laso 2896
2 Marcelinho Huertas 2515
3 Nacho Azofra 2224
4 Albert Oliver 2074
5 Nacho Rodríguez 2032
6 Elmer Bennett 1838
7 José Luis Llorente 1768
8 Andre Turner 1748
9 Sergio Llull 1739
10 Pablo Prigioni 1721
Jugador Partidos
1 Felipe Reyes 824
2 Rafa Jofresa 756
3 Nacho Rodríguez 737
3 Nacho Azofra 705
5 Juan Carlos Navarro 689
6 Álex Mumbrú 677
7 Albert Oliver 675
8 Fran Vázquez 655
9 Alberto Herreros 654
10 Fernando San Emeterio 643

"A otra cosa mariposa", esas fueron las últimas palabras de Albert Oliver en su carta de despedida como jugador de baloncesto profesional. Cerró, así, una carrera intachable del mismo modo con el cual la forjó: con naturalidad, solvencia y sin grandes alardes (más allá de sus tiros imposibles tan característicos, claro).