Crónica

Tau se rehabilita con un Scola estelar (97-67)

El Tau Cerámica se ha rehabilitado tras el desastre del jueves ante el Maccabi consiguiendo un claro triunfo ante el Leche Río Breogán: 97-67. Luis Scola dio toda una exhibición al lograr 40 puntos y 12 rebotes para 52 de valoración

Exhibición de Luis Scola: 40 puntos, 12 rebotes y 52 de valoración (Foto EFE)
© Exhibición de Luis Scola: 40 puntos, 12 rebotes y 52 de valoración (Foto EFE)
  

Vitoria, 21 abr (EFE).- La soberbia actuación de Luis Scola, autor de 40 puntos, permitió la rehabilitación del Tau Cerámica en la Liga ACB ante el Breogán tras el mazazo que supuso el pasado jueves la eliminación en la Euroliga, aunque el cómodo triunfo local (97-67) se vio empañado por la lesión de cervicales sufrida por Andrés Nocioni en la recta final.

La desconcertante puesta en escena de los vitorianos, aún bajo los efectos de la paliza encajada ante el Maccabi, añadió cierta incertidumbre al desenlace, aunque el partido se ajustó con el paso de los minutos al guión preestablecido y los lucenses sucumbieron por su flagrante inferioridad física así como por su debilidad bajo los tableros.

El Breogán dominó en el tramo inicial gracias a los réditos extraídos de las defensas alternativas planteadas por Paco García (1-3-1, 2-3 y 2-1-2), que surtieron los efectos deseados para desatascar la ofensiva local. El inquietante 19-25 que señalaba el marcador en el minuto 9, sin embargo, se convirtió en una ventaja efímera para los visitantes.

Dusko Ivanovic, que volvió a dejar en el banquillo a Dejan Tomasevic en otra prueba más de su desencuentro con el pívot serbio, ordenó subir las líneas en defensa y constantes "dos contra uno" para reconducir la situación. Sus jugadores, algo que tan sólo se consigue con muchas horas de entrenamiento, efectuaron a la perfección el trabajo encomendado por el técnico montenegrino.

El grupo de Paco García sufrió un calvario entre los minutos 10 y 16 para siquiera pisar el campo contrario y añadió en este intervalo únicamente dos puntos a su casillero tras una catarata de pérdidas de balón. Un contundente parcial de 21-2, labrado con un descomunal trabajo defensivo que se tradujo en múltiples recuperaciones de balón, el despliegue físico de Nocioni y la magistral actuación de Scola -autor de 22 puntos en la primera mitad-, volteó de forma espectacular el partido (40-27, m. 16).

El duelo supuso ante todo la rehabilitación de algunos jugadores locales, especialmente Luis Scola. El ala-pívot argentino formó una conexión diabólica con Bennett y se convirtió en una pesadilla para el juego interior visitante, debilitado por los problemas físicos de un Bobby Martin en el ocaso de su carrera baloncestística. Las ventajas crecieron de forma imparable (79-49, m. 32) gracias a la extraordinaria circulación de balón del Tau en ataque, lo que siempre se tradujo en cómodas posiciones de tiro.

El convincente triunfo baskonista, en cambio, quedó en un segundo plano con la lesión de Andrés Nocioni. El alero argentino, uno de los más destacados del partido, recibió en el minuto 34 un codazo fortuito en las cervicales por parte de Devin Davis y, después de permanecer inmóvil un cuarto de hora sobre la cancha en una imagen dramática, tuvo que ser retirado en camilla con un collarín en el cuello en espera de conocer el alcance de la lesión.

Arbitros: Betancor, Fernández y Sánchez Martín. Excluyeron por personales a Sergi Vidal (m. 35).
Incidencias: Encuentro correspondiente a la jornada número treinta de la Liga ACB, disputado en el Pabellón "Fernando Buesa Arena" ante 6.400 espectadores. Los miembros de la seguridad, en medio de la pitada generalizada en el pabellón, retiraron en el primer cuarto una pancarta colocada por algunos componentes de la peña "Indar Baskonia" en la que se podía leer "Querejeta vendido" por permitir el máximo mandatario del Tau que se luciera publicidad de una compañía eléctrica israelí el pasado jueves durante el partido correspondiente a la Euroliga ante el Maccabi de Tel Aviv. Andrés Nocioni tuvo que ser retirado en camilla a falta de 6 minutos para el final con un collarín en el cuello tras recibir un codazo de Devin Davis.