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James Goldstein: El aficionado más rico del mundo

Moda, arquitectura y baloncesto. Así se presenta James Goldstein, el seguidor más peculiar de la NBA. Conocido por su sombrero vaquero, este amigo de las estrellas es todo un apasionado del deporte de la canasta: "Soy un aficionado al baloncesto y lo seré para el resto de mi vida porque la NBA es una parte muy importante de ella", afirma. Capaz de recorrer el país para ver un partido de alguno de sus amigos, Goldstein reconoce ser amigo y admirar a Pau Gasol. "Pau estuvo en mi casa. Creo que es un jugador fantástico, un jugador All Star". Álvaro Paricio entrevista en exclusiva a este peculiar y afable millonario, que no dudó en visitar España con motivo del Eurobasket

James Goldstein nos saluda con su característico sombrero de vaquero
© James Goldstein nos saluda con su característico sombrero de vaquero
  

Redacción, 22 nov. 2007.- El universo NBA está lleno de estrellas, unos pocos astros y algún que otro agujero negro. Sin embargo, dentro de este star system que es la liga americana también hay un espacio reservado para otras supernovas; famosos procedentes del mundo de la música, el cine o la televisión que son atraídos por el glamour que envuelve a la NBA. Jack Nicholson, Beyoncé, Spike Lee o Billy Crystal son algunas de las estrellas que más fácilmente podemos reconocer en un partido de la NBA. Pero si preguntamos a los propios jugadores quién es su famoso preferido, no hay dudas, la mayoría responderá que James Goldstein. Pero ¿quién es este peculiar seguidor de la NBA?

Muchos son los adjetivos que se asocian a su nombre: el vaquero de la NBA, millonario excéntrico, arquitecto visionario, creador de estilos... Pero en realidad, Jim es un hombre incalificable, pues es imposible describir una personalidad tan poliédrica como la del fan número uno de la NBA. ¿Exageración? Veamos: La pasión de Goldstein por el baloncesto, y en concreto la NBA, le lleva a recorrer el país varias veces al año, ver cerca de 100 partidos de temporada regular y no perderse un partido de las Finales NBA.

A pesar de lo que parezca ahora, lo de Goldstein con el baloncesto no fue un amor a primera vista, más bien la NBA tardó en entrar en su vida, eso sí, una vez entró lo hizo para siempre. "Sigo el baloncesto desde joven. Ya con 15 años empecé mi relación con la NBA trabajando para el equipo de Milwaukee y para una radio que seguía los partidos del equipo. Desde entonces soy un aficionado al baloncesto y lo seré para el resto de mi vida porque la NBA es una parte muy importante de ella", señala Goldstein.

Desde entonces, este multimillonario de Beverly Hills no pierde ocasión de ver un partido en directo y aunque muchos han intentado asociarle como seguidor de Los Angeles Clippers, él niega ser fan de un equipo en concreto. ·Es mi reputación (ser de los Clippers) porque soy abonado del equipo y salgo en la tele en todos sus partidos, pero no es cierto que sea seguidor de los Clippers. Soy un fan de la NBA en general y, por lo tanto, soy un seguidor de todos los equipos NBA". No es para menos. El bueno de Jim Goldstein durante la liga regular es lo más parecido a un jugador o árbitro de la NBA, todo el día viajando en aviones para ver partidos en directo. "Voy a más de 100 partidos al año, alrededor de todo el país. Además de ser abonado de los equipos de la ciudad de Los Angeles intento no perderme un partido de Playoffs y, por supuesto, de las Finales de la NBA, el gran acontecimiento del año".

Un ajetreo y tren de vida sólo al alcance de muy pocos. Pero si Goldstein es conocido por su amor al baloncesto también lo es por su riqueza. El origen de su fortuna es un misterio aunque Goldstein reconoce que "los negocios siempre me han ido bien". Suele relacionársele con la moda, pero no es modisto, como tampoco ejerce de arquitecto, otra de sus aficiones. "Ser arquitecto es uno de mis trabajos. Quizás sea uno de los más conocidos porque mi casa de Beverly Hills es muy famosa por su original decoración y arquitectura. Además en ella se han grabado videoclips, programas de radio, series de televisión y películas. Sin embargo no es el único trabajo que tengo; de hecho yo sólo soy arquitecto para mí mismo, no trabajo para los demás". No es de extrañar el prestigio de semejante mansión: en ella se han grabado películas como El Gran Leboswsky o Los Ángeles de Charlie.

A pesar de su fama y reconocido prestigio, más que de moda o arquitectura, lo que realmente le apasiona a Goldstein es hablar de baloncesto y no sólo de la NBA, las amistades trabadas durante sus viajes ha hecho de Goldstein un perfecto conocedor del baloncesto internacional. "Me gusta mucho el baloncesto, así que también sigo de cerca el baloncesto europeo en donde tengo muchos amigos con los que disfruto viendo jugar por todo el mundo. Durante el Europeo disputado en Madrid he podido estar con mis amigos Tony Parker y Ronny Turiaf". Goldstein destaca además la calidad y la garra de los jugadores españoles, es un fan de José Manuel Calderón y, sobre todo, de Pau Gasol con quien mantiene una buena relación. "Pau estuvo en mi casa. Creo que es un jugador fantástico, un jugador All Star al que considero un buen amigo", afirma Goldstein.

Siendo un superfan de la NBA y estando en España hay una pregunta que no se puede escapar: ¿Quién es el auténtico campeón del mundo? "Creo que el campeón de la NBA es el campeón del mundo porque es el mejor equipo de la liga donde juegan los mejores jugadores. Siempre existe la duda sobre quién es mejor: un equipo con los mejores jugadores o el país con los mejores. Desgraciadamente no sé la respuesta para esta pregunta", se sincera Goldstein.

Con la NBA recién iniciada, muchos hablan de Boston Celtics como el equipo que mejor se ha reforzado y un claro aspirante para el anillo. Sin embargo, Goldstein considera que "no hay ningún favorito" aunque reconoce que "Boston es un equipo que se ha reforzado muy bien y va a ser excitante seguirlo".

Uno de los grandes dilemas de este verano en la NBA es si la salida del Oeste de grandes estrellas como Kevin Garnett, Ray Allen o Zach Randolph provocará un cambio de poder entre las conferencias. Preguntado por ello, Goldstein sigue considerando que "los mejores equipos están en el Oeste. Este año Houston tiene un tremendo equipo con el fichaje de Scola, que es un grandísimo jugador. Creo que el campeón este año está entre Dallas, Phoenix, Houston y San Antonio".

Jim Goldstein se despide con una gran sonrisa, se nota que le gusta hablar de baloncesto, sus modales y amabilidad demuestran que también es un crack en las distancias cortas y eso que su peculiar sombrero y unas botas poco convencionales poco tienen que ver con lo que se estila estos días en los pabellones de baloncesto. Y es que en el mundo de Jim Goldstein no hay espacio para la normalidad; todo es a lo grande. Si no, pídanle una de sus tarjetas de visita y lo comprobarán.