Dícese de una intrahistoria aquello que sirve de decorado del relato más visible, el que llena portadas y abre telediarios. Viene a ser, según el autor del vocablo, Miguel de Unamuno, la “sinfonía” que permite poner en valor la transcendencia de los propios hechos. La Copa del Rey de baloncesto ha perdurado a lo largo de los años precisamente gracias a estos momentos, buenos o malos, pequeños o grandes, pero inolvidables, los cuales han contribuido a que el torneo llegue ahora a su 88º aniversario. El 41º del periodo acb.
En esta ocasión, la fiesta de las aficiones desembarca en Málaga por quinta vez, elevando a esta ciudad andaluza al primer puesto en la lista de sedes que más veces han acogido una fase final de la competición. También se han jugado un total de cinco en Madrid y Vitoria-Gasteiz.
Ya en la primera ronda, la Copa 2024 empieza fuerte: habrá reedición de la final de Badalona 2023. El vigente campeón, Unicaja, tiene la difícil tarea de defender el título, algo que no ha conseguido ningún equipo en toda la historia fuera del binomio formado por Barça y Real Madrid. Tras ganar su primer título en 2005 con Sergio Scariolo, la entidad cajista no pudo pasar de semis al año siguiente.
El Lenovo Tenerife, actual subcampeón, tiene en sus manos el consumar su venganza particular y prolongar, un año más, la maldición más famosa del torneo del K.O. No hay que olvidar que, tras el icónico tapón de Tim Abromaitis al Joventut en semis, ya van 21 ediciones consecutivas, desde Vitoria 2002, sin que un anfitrión se corone en su feudo. El balón vuelve a estar en el tejado del conjunto lagunero.
Cuando Marcelinho Huertas entre en acción este viernes en el Martín Carpena se convertirá en el cuarto jugador de la historia de la competición en disputar un partido con 40 años o más. Joan Creus (TDK Manresa) y Darryl Middleton (Akasvayu Girona) lo hicieron en dos ediciones, mientras que Felipe Reyes se unió a esta exclusiva lista hace tres temporadas. Ninguno de ellos consiguió levantar el título, con lo que el base brasileño tiene la oportunidad de erigirse como el campeón más veterano de todos los tiempos.
Antes de todo esto, en el partido inaugural entre Real Madrid y UCAM Murcia podría caer otra gran hazaña. Y es que Sergio Llull (62) está a solo dos canastas de suceder a Juan Carlos Navarro (63) en el trono de máximo triplista histórico de la Copa del Rey. Universitarios y madridistas ya cruzaron sus caminos en el partido por el tercer y cuarto puesto de Murcia 1996, imponiéndose los visitantes por 68-74.
Gane quien gane esta vez, terminará un ciclo, pues el club blanco no cae en cuartos desde el 2013 y UCAM no lo ha hecho nunca en sus dos únicas participaciones. Si el base Facu Campazzo se reencuentra con el equipo con el que dio el salto al estrellato; el técnico asistente Blagota Sekulic lo hace con quién debutó en Liga Endesa en su etapa de jugador y con quién llegó a una final copera.
Por su parte, el Barça llega a Málaga con aspiraciones de romper el monopolio del Real Madrid como Rey de Copas. El bagaje de títulos es de 27 a 28, respectivamente. El primer reto de los hombres del debutante Roger Grimau es un derbi catalán ante BAXI Manresa que históricamente ha determinado el campeón. Quién ha ganado el duelo, ha terminado levantando el trofeo. En 1980 y 2022 la moneda cayó del lado blaugrana, mientras que en la final de 1996 se coronaron los del Bages tras una prórroga. Salva Maldonado, primer entrenador del TDK en aquella epicidad, vuelve a la carga al lado de un Pedro Martínez que anda tras la única pieza que le falta para completar su palmarés acb.
Habrá otra revancha en el Dreamland Gran Canaria-Valencia Basket. En la última jornada de la primera vuelta, la escuadra claretiana venció por 79-86 en el choque directo, arrebatándole a su rival la condición de cabeza de serie. Pero la cosa viene de más lejos. En A Coruña 2016, Aíto García Reneses dirigió a la nave canaria hacia su primera final copera, tumbando en los cuartos a un Valencia Basket que, en ese momento, era líder indiscutible de la Liga Endesa tras encajar una sola derrota en 20 jornadas. Al año siguiente, en Vitoria 2017, volvieron a cruzarse en primera ronda con resultado opuesto: los taronjas se llevaron el duelo, liderados por un implacable Bojan Dubljevic (32 de valoración), y llegaron a disputar la final.
Como ciudad anfitriona, Málaga ha sido el escenario de páginas importantes en los libros de historia de la Copa. En 2001, en el recién estrenado Martín Carpena, E.T. voló por primera vez. Pau Gasol se colgó su primer MVP después de liderar el título blaugrana con 25 puntos y 39 de valoración en el partido por el título. Tenía 20 años y una carrera legendaria por delante. Aquel año la final volvió a jugarse en domingo, un formato que regresó para quedarse después experimentar con él en la década de los 90. En 2007, el mítico Pedro Barthe narró su última edición del torneo y, entre otras cosas, Sergio Llull firmó en 2014 uno de sus primeros mandarinazos insignes para situar al Real Madrid como líder en palmarés.