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España logra una agónica victoria que le permite soñar (81-74)

El conjunto español se deshizo de Finlandia tras un dramático partido y este domingo peleará con Bahamas por estar en los Juegos Olímpicos. Willy Hernangómez (28 puntos) y Lorenzo Brown (15 y siete asistencias) destacaron en el triunfo de España.

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España venció tras 40 minutos de tensión a Finlandia (81-74) en la segunda semifinal del preolímpico.

Fiel a su gen competidor, la selección española saldó su duelo frente Finlandia demostrando que puede tener días buenos o malos en ataque, pero que sigue siendo innegociable el esfuerzo en ella.

El equipo fines, con menos talento pero igual de disciplinado y entregado que el español, plantó una dura batalla con una dura defensa que, por momentos, bloqueo la ofensiva española. Sólo la efectividad de Willy Hernangómez (28 puntos) y el desequilibrante Lorenzo Brown (15 puntos y siete asistencias) superaron las trampas del rival.

Willy, fue un martillo pilón durante el partido y el base se echó el equipo a las espaldas en el segundo cuarto (anotó 11 puntos de los 21 del equipo en ese periodo) para remontar un marcador adverso y dar tranquilidad cuando los nervios aparecieron en forma de pérdidas de balón y extraños fallos.

La segunda parte comenzó con malas noticias para España porque la efectividad triplista de Finlandia apareció (anotó cinco, uno más de los que llevaba España en tres cuartos) y ésta le dio la vuelta al marcador para llegar al tramo final con ventaja.

Por momentos, la tensión se convirtió en drama porque no parecía haber forma de romper la zona finesa, pero entonces emergió el impagable carácter de Alberto Diaz que, con dos triples y un robo, metió al equipo en el partido y activó a la Fonteta.

El partido táctico saltó por los aires y devino en uno de corazón y coraje… y ahí España sigue siendo insuperable. No fue el mejor día, pero sí el que permite soñar este domingo con otros Juegos Olímpicos.

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El choque arrancó con la defensa española muy pendiente del tiro exterior fines. Finlandía es un equipo de alto volumen de tiro, pero España supo contenerla (falló sus cuatro primeros triples) y cerrar bien el rebote gracias a la presencia de Aldama.

Lo malo de este plan inicial es que no se traducía en ventaja en el marcador. Puntos fáciles en la zona y en contraataque subían la cuenta de Finlandia hasta cerrar el primer cuarto con un parcial 0-9 que le valió irse por delante (17-20). El partido estaba enmarañado y espeso. La férrea defensa finesa cortaba la circulación de balón española y sólo la capacidad de desborde de Darío Brizuela rompía la tela de araña tejida.

España entendió que a la defensa sólo se le podía combatir con defensa y Usman Garuba, Jaime Pradilla y Alberto Diaz entraron para subir la intensidad atrás y permitir que España cerrase su aro durante más de cinco minutos del segundo cuarto.

Desafortunadamente, el ataque seguía careciendo de fluidez y, tras Darío Brizuela, sólo las acciones puntuales de Brown consiguieron romper el entramado defensivo fines. El base español anotó 11 puntos en el segundo cuarto y, dada la igualdad prevaleciente, eso sirvió para que España respirara al descanso con ocho puntos de ventaja.

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La segunda parte arrancó con Finlandia recuperando su acierto triplista y tres aciertos desde más de 6,75 apretaron el marcador (44-41). El contrapeso en el partido lo ponía Willy Hernangómez, quien anotó los nueve primeros puntos del equipo tras la reanudación.

El problema es que todo pasaba por sus manos y las de Santi Aldama (15 puntos y ocho rebotes), y Finlandia se refugió en una zona buscando cortar las vías de anotación interior la efectividad triplista española. El recurso táctico volvió a bloquear al equipo de Sergio Scariolo y un parcial 0-12 les dio ventaja al final del tercer cuarto (56-59).

El panorama se oscureció cuando la ventaja finesa llegó a ser cinco puntos. La zona seguía siendo un mal de muelas indescifrable. El partido requería de valientes y ahí emergió Alberto Díaz para dar la vuelta al marcador y al ánimo del pabellón.

Tras minutos de sequía, el partido pasó a ser un duelo de pistoleros con los dos equipos intercambiando triples. Ninguno de los dos era capaz de hacer dos buenas defensas y ataques seguidos, con lo que el partido se dirigió inexorablemente a un final dramático.

Toda la tensión se condensó en 120 segundos donde apareció el orgullo de un legado ganador y la frialdad de Willy Hernagómez para meter cuatro puntos seguidos que supieron a gloria porque llevaron a Finlandia a la precipitación y a España final del preolímpico.

Este domingo queda dar el último paso para repetir sueño olímpico frente a una Bahamas, que derrotó al Líbano 89-72 y que se presenta con el temible tridente NBA que forman DeAndre Ayton, Eric Gordon y Buddy Hield.