Antes de arrancar el Joventut-Benfica, en una presentación individual de cada miembro de la plantilla del conjunto badalonés, Ricky Rubio se llevó una ovación atronadora. Segundos después fue recibido el nuevo capitán, el pívot Ante Tomic, con gritos de ‘MVP’.
Con la fiesta ya terminada, el partido arrancó con los de Dani Miret muy fallones en ataque, cosa que aprovechó el Benfica y un gran Aleksandr Dziewa para abrir la primera brecha en el marcador (7-12, min. 5).
Instantes después, con la entrada de Ricky en pista, el público se entonó y la Penya mejoró en ambos lados de la pista para empatar la contienda (14-14, min. 8).
Al final, los portugueses se marcharon por delante al término del primer periodo con un ajustado 19-20 que hacía justicia por lo visto hasta el momento en la pista.
La igualdad se mantuvo en el segundo cuarto y tan sólo la entrada de Henri Drell hizo que los catalanes se pusieran por delante (35-32, min. 17).
Al tiempo de descanso se llegó con el marcador de empate a 39 puntos, en un choque con muy poco ritmo.
En la reanudación, el Joventut puso la sexta marcha en el acelerador con un gran Drell y un efectivo Tomic bajo aros para poner la máxima momentánea (57-46, min. 28).
Desde entonces, dicha máxima fue en aumento ante un Benfica que vio como los tiros que entraron en la primera mitad, dejaron de hacerlo en la segunda. Además de bajar el ritmo defensivo, algo que benefició a los locales.
Ya en el último periodo, los badaloneses se dispararon tras un triple de Cameron Hunt y dejaron el choque prácticamente visto para sentencia (75-61, min. 33).
Al final, el Joventut certificó el triunfo por 88-75 en el último duelo de pretemporada, antes de arrancar la Liga Endesa el próximo domingo a las 12:00 horas en la pista del Covirán Granada.