Finales NBA: Buscamos las posibles claves en el decisivo séptimo partido

Redacción, 17 jun. 2010.- Casi 8 meses después desde que empezase la temporada regular el 27 de Octubre, Lakers y Celtics se jugarán el anillo esta madrugada como colofón a una temporada llena de sucesos y con unas series finales extrañas, en las que cada partido ha sido radicalmente diferente al anterior. Si la lesión en la rodilla de Andrew Bynum ha condicionado las rotaciones y los minutos de los jugadores interiores en los Lakers, la baja de Kendrick Perkins supone todo un palo para Boston en sus aspiraciones de vencer el partido decisivo. Es, por lo tanto, lógico que la pintura pase a tener protagonismo en todos los análisis.

Los Celtics, sin Perkins

Todo hace indicar que Rasheed Wallace ocupará su lugar en el quinteto titular. Es probable que se encargue desde el primer momento de la marca de Pau Gasol mientras Kevin Garnett pasaría a ocupar la teórica posición de center, principalmente por dos motivos:

La envergadura de Wallace y sus largos brazos han logrado poner en problemas a Pau en algunos momentos de la serie, dificultando sus lanzamientos

Disminuir el rol defensivo de Garnett puede permitir que tome mayores responsabilidades en el apartado ofensivo, dado que la aportación en ataque de Boston fue uno de sus principales problemas durante el anterior partido

Quedarían así como primeros recambios en la pintura verde Glen Davis y Shelden Williams. El primero es capaz de lograr rachas de anotación, pero se ha mostrado menos efectivo cuando ha debido emparejarse con las “torres gemelas” de los Lakers, y es que los kilos y centímetros de Pau o Bynum han limitado a lo largo de toda la serie la aportación en la pintura de Boston. Las limitaciones ofensivas de un Williams que apenas ha entrado en la rotación de su equipo suponen un problema mucho menor para los de Jackson, y en defensa tampoco logra compensar la aportación de Perkins, habiendo sido una presencia que ha dado escasos problemas a los Lakers en sus minutos en cancha.



¿Qué ganan y pierden los Celtics sin Perkins? Pese a que sus promedios en las series finales no lleguen a alcanzar los 7 puntos y 7 rebotes, su aportación en la pintura ha sido fundamental en la batalla por el rebote que ha sido decisiva hasta el momento en las series finales y por su presencia defensiva en individual, dificultando lanzamientos cómodos de Pau y Bynum. Su agresividad y aportación en las ayudas dan también un plus defensivo a Boston, y en ataque es pieza básica a la hora de liberar situaciones de tiro para Ray Allen con sus bloqueos. En el lado negativo, una lesión de muñeca le ha venido lastrando las últimas semanas y ya no realizaba lanzamientos de media distancia, lo que permitía cerrarse a la defensa angelina. En algunos de los peores momentos de la ofensiva céltica, tanto Rondo como Perkins o Tony Allen eran flotados por sus marcadores, fijando la defensa a Pierce, Ray Allen o Garnett, quienes se encontraban con muchas dificultades para lograr lanzamientos cómodos.

Garnett en las continuaciones y tiros a media distancia, Glen Davis con su intensidad, algún tiro exterior y agresivo en las cercanías del aro, Rasheed Wallace con sus triples frontales y lanzamientos exteriores a tabla; éstas serán las armas a las que intentarán sacar partido los de Rivers y compensar la ausencia de Perkins. Con Williams en un papel probablemente marginal, la posibilidad de los tiros exteriores en un muy limitado Scalabrine o configuraciones con “cuatro bajitos parecen opciones menos probables para Boston..., y con menor capacidad de éxito

Los minutos de Bynum y la presencia de Pau

Es difícil saber cuál podrá ser la aportación de Bynum. En sus mejores minutos, los Lakers logran un enorme muro defensivo junto a Gasol, cierran las cercanías del aro e imponen una gran presencia ofensiva. La lentitud en sus movimientos o escasa capacidad de salto han marcado sus peores minutos, con complicaciones a la hora de cerrar el rebote o continuar situaciones defensivas tras bloqueo.

Curiosamente, la ausencia de Perkins hace su presencia menos necesaria, puesto que Odom y Pau pueden generar situaciones de ventaja física ante la defensa de Boston, en las que también sacar partido de sus facilidades en la anotación. Sin duda, todo un respiro para los de Jackson, que han impuesto su superioridad en la pintura a lo largo de toda la postemporada, tanto ante unos Thunder en los que la intensidad y agresividad de Ibaka parecía por momentos su única arma interior, como ante unos Jazz en los que Milsap y Boozer acabaron “desesperados” por su inferioridad en centímetros, o frente a unos Suns que llegaron al punto de “desentenderse” de la defensa de Artest u otros exteriores para cerrar la avería que tenían en la pintura.

Pau Gasol se encuentra en una situación fantástica para ser “elemento diferencial” en el séptimo partido. Su aportación como local en los partidos de Playoffs ha sido más que notable, y tan sólo en el primer partido ante los Thunder (19-13) y el último ante Boston (17-13-9) se quedado por debajo de la veintena de puntos. Con o sin Bynum, la ausencia de Perkins le genera mayores -aún más- situaciones favorables, y es probable que podamos asistir a uno de sus grandes partidos, dada también su facilidad para el paso en el caso de recibir un “dos contra uno”.



.... Sin olvidarnos del juego exterior

Sería normal pensar en un inicio de partido por parte de Kobe Bryant similar al anterior, tomando la responsabilidad en el apartado ofensivo desde el inicio del choque. Por su capacidad de anotación desde el desborde en individual y múltiples recursos, podría ayudar a un despegue temprano de los Lakers que les pondría muy cerca del anillo. Se antoja importante una mayor presencia de Rondo que en anteriores choques para obligarle a un esfuerzo defensivo que pueda limitar su aportación en ataque, y las rachas desde el exterior podrían también decidir el partido.

Desde un Ray Allen que pasó de anotar 7 triples seguidos en el segundo encuentro a errar 18 de forma consecutiva hasta el irregular Artest al que la defensa de Boston libera en ocasiones, jugadores como Fisher, Vujacic, Farmar o Robinson son también candidatos a anotar en rachas que puedan ayudar a romper el choque. Tony Allen podría encontrar mayores facilidades para anotar sin la presencia de Bynum para cerrar sus penetraciones y Paul Pierce tomó el mando de su equipo en muchas situaciones de los últimos dos partidos, generalmente buscando situaciones en las que finalizar desde el lado derecho del ataque a 4 o 5 metros de canasta y aprovechando a la perfección los cambios defensivos en los bloqueos para sacar ventaja.

Múltiples son los pequeños aspectos que pueden decidir el choque, ¿cuál será la clave? Difícil saberlo

¡Habemus séptimo!

Tan sólo una de las últimas 16 temporadas ha visto la NBA cómo el anillo se decidía en el último partido, con el triunfo de San Antonio Spurs ante los Pistons. La emoción y los marcadores ajustados han marcado la tendencia en la mayor parte de los casos anteriores, y es que todo indica que podríamos tener que prepararnos para vivir uno de esos grandes momentos que quedan en las retinas del aficionado. Que así sea.


* Después de una prórroga
** Se jugaron dos prórrogas