Sobre las 20 horas del sábado 18 de diciembre me presenté en La Maseria, un restaurante italiano situado en la zona más céntrica de New York. Justo en la entrada nos encontramos con Arturas Karnisovas, que llegaba acompañado de su esposa, Gina. El lituano, que desde hace un año trabaja en la NBA como Manager de Operaciones Internacionales, nos presentó al resto de invitados a la cena. Kim Bohuny, compañera de Karnisovas en las oficinas de New York, fue a la primera que conocimos. Bohuny, además de su trabajo en las oficinas de la liga en New York, es propietaria del restaurante italiano, uno de los dieciocho mil establecimientos que hay en la Gran Manzana.
Salvador Vilella, Gerente General de la Selección Masculina de Puerto Rico, fue el siguiente; El directivo estaba acompañado de su esposa, Debbie, y sus dos hijos, Jorge y Stephanie, unos perfectos conocedores del baloncesto internacional. Tras sentarnos en la mesa llegaron Aleksandar Radojevic, en aquellos momentos pívot de los Jazz, acompañado de su agente. A los pocos minutos entraba en el restaurante Gordan Giricek, el jugador croata que compartió equipo con Pau Gasol y que actualmente lo hace con Raül López.
La proximidad en la mesa con la familia puertorriqueña hizo que entablara rápidamente conversación, y como no podía ser de otra manera, Ésta se centró en Carlos Arroyo, auténtico ídolo de todos los aficionados boricuas. Vilella consideraba que, aunque breve, el paso de Carlos por la ACB fue muy positivo para él, como lo sería para muchos otros jugadores. El directivo nos confesó que Peter John Ramos, center de los Washington Wizards, tuvo alguna oferta de la ACB, y creo que se equivocó al no aceptar. Está muy verde y necesita centrarse más, algo complicado en un equipo donde apenas va a tener posibilidades. Precisamente la falta de pívots importantes ha provocado que los dirigentes de la federación hayan pedido una prórroga a Piculín Ortiz (en la selección), y me parece que seguirá jugando durante algún tiempo más. Precisamente el pasado ACB de Piculín Ortiz y de Ramón Rivas, dos de los jugadores más carismáticos en la historia del baloncesto en Puerto Rico, sirvieron como ejemplo al directivo para señalar que la ACB es una liga muy importante para los jugadores del continente americano. Allí saben que además de competir con los mejores crecen como profesionales.
Los dos jugadores de los Utah Jazz, Radojevic y Giricek, comentaban la particularidad de Salt Lake City, especialmente el frío y las muchas diferencias que existen respecto a las grandes ciudades norteamericanas. Es un sitio realmente distinto a cualquier otro lugar pero nos sentimos muy a gusto, señalaba Aleksandar Radojevic, jugador que en estas últimas semanas está teniendo mucha más participación, incluso saliendo en el quinteto inicial. Su agente, tras conocer nuestra procedencia, se mostraba exultante por el partido que horas antes había firmado otro de sus jugadores, Pedrag Savovic: Ha jugado un gran encuentro, ha sido el mejor del Bilbao y su equipo ha vuelto a ganar. El partido había enfrentado al Fórum Valladolid y al Lagun Aro Bilbao Basket sólo 4 horas antes, finalizando con victoria del equipo vasco con la mejor actuación en la ACB del ex de los Denver Nuggets.
Tras un más que apetitosa cena (carpaccio de salmón, ensalada de mozzarella y surtido de chocolate) pudimos hablar tranquilamente con nuestro anfitrión, Arturas Karnisovas. El jugador nos explicó su situación actual: Desde hace un año trabajo en la NBA, ocupando el cargo de Manager Basketball Operations International. Mantenemos contacto con casi todos los jugadores extranjeros de la liga, para conocerlos y tratar de entender su posibles peticiones y problemáticas. Para la liga es importante conocer bien a los jugadores foráneos, ya que actualmente son más de ochenta pero en dos o tres temporadas pasarán sobradamente de los cien.
Además de este trabajo de relación con los jugadores Karnisovas se ocupa del área que promociona el baloncesto en todo el planeta. La iniciativa Baloncesto sin Fronteras está siendo una gran experiencia. Nos ha permitido visitar y conocer gente de sitios tan distintos como China, Sudáfrica o Italia. Recuerdo con especial cariño el día que conocimos a Nelson Mandela. Arturas nos relata su experiencia en China, uno de los países que más ha progresado en los últimos años en baloncesto y en el deporte en general: En Pekín tuve una experiencia fantástica con el clínic que realizamos. Realmente allí el baloncesto es un deporte importante. Hay jugadores destacados, pero a veces se nota que sienten demasiado respeto en la pista. El ex del FC Barcelona recuerda que en alguna ocasión tuvo que pedir a los jugadores más intensidad, y que jugaran más duro e intensos. Les cuesta entender que a veces en el baloncesto hay que ser agresivos para lograr un nivel competitivo.
Muchos aficionados al baloncesto se preguntan porque Arturas Karnisovas decidió colgar las botas con 31 años recién cumplidos. El jugador lo tiene claro y no se arrepiente en absoluto de haber tomado esta decisión. Me encanta el baloncesto y por eso mismo no quería seguir jugando por inercia. He tenido la gran suerte de jugar sólo en grandes clubes y creía que era perfecto retirarme en un equipo como el FC Barcelona, donde me he sentido como en casa. Arturas asume que a veces a los jugadores les cuesta mucho decir basta. Es difícil renunciar a ese último contrato y más aún si no tienes bien planificado tu futuro tras la retirada.
El ex internacional lituano cree que la preparación universitaria en Seton Hall le sirivió para plantearse muchos proyectos tras la carrera deportiva, y la oportunidad que me ha brindado la NBA me está posibilitando aprender mucho y poder aplicar lejos de la pista mi experiencia en estos años como deportista. Además de buscar nuevas experiencias laborales, también ha pesado mucho el hecho de tener un familia. Es difícil estar con ellos si estás viajando y jugando competiciones once meses al año. Tengo dos hijos, Eric y Michael, y quiero verles crecer cada día, señala Karnisovas mientras explica con orgullo el gran talento musical que muestra su hijo menor.
La última etapa de Arturas Karnisovas como jugador de baloncesto permitió al jugador vivir de cerca el fenómeno Gasol. Tuve la suerte de estar en mi segunda etapa cuando él explotó. Su progresión fue increíble, realmente era bueno aunque nadie podía imaginar hasta donde llegaría. En la NBA se le considera una de las grandes estrellas. En ese equipo teníamos dos jugadores, Dueñas y Gasol, que podían machacar la canasta sin mover sus pies del suelo. Era un súper equipo, con una intimidación y envergadura fuera de lo normal, recuerda Arturas, en una temporada en la que el FC Barcelona contaba con Gasol, Dueñas, Savic, Rentzias y Elson como jugadores en la pintura.
El impacto de los jugadores españoles hace que cada año la ACB sea más seguida en Estados Unidos. Aquí se habla mucho de Rudy Fernández y de otros jugadores españoles. Los directivos de las franquicias tienen claro que los europeos son ahora una apuesta bastante segura, comenta el lituano, que considera a Macijauskas como uno de los mayores talentos del continente europeo.
También nos habla de otro compatriota suyo, Saras Jasikevicius. Muchos jugadores europeos no reciben ofertas interesantes de equipos NBA hasta que demuestran su nivel ante combinados USA. Saras lo hizo en Atenas y entonces algunos equipos se interesaron por él, aunque las ofertas no fueron lo suficientemente convincentes. Ibrahim Kutluay hizo un partidazo en una ocasión y esto le ha valido la oportunidad de los Seattle Supersonics. Karnisovas, que también fue compañero de Jasikevicius en el FC Barcelona y en la selección lituana, no nos desvela el futuro del jugador del Maccabi, aunque los rumores apuntan a que volverá al Barça. Es un club al que él quiere mucho y no sería extraño que acabara jugando otra vez allí.
Para finalizar Karnisovas nos pidió que trasladáramos un fuerte abrazo a todos los aficionados de la ACB, especialmente a los del FC Barcelona, un equipo al que quiero mucho.
Artículo
Marcus: Una cena en New York
En su reciente viaje a New York, el redactor de ACB.COM Marcus Ramon tuvo la oportunidad de cenar en un restaurante italiano con el ex jugador de la ACB Arturas Karnisovas y los jugadores de la NBA Giricek y Radojevic, además de un representante de la Federación de Puerto Rico. Tan estelar presencia generó apasionantes discusiones acerca de la actualidad de la liga norteamericana, de las carreras de Arroyo y Piculín Ortiz o de los recuerdos de Arturas en Barcelona. Marcus relata en primera persona los detalles de una velada inolvidable
