"Tengo muchas ganas de empezar a trabajar y de intentar revertir una situación bastante difícil, pero reversible. La cuestión mental es importante porque los jugadores están un poco decaídos, vamos a empezar por ahí y luego iremos poco a poco, las prisas no son buenas. Quedan diez partidos, que son muchos". Josep Maria Raventós intentaba trasmitir tranquilidad a sus hombres nada más tomar el mando del Urbas Fuenlabrada, a finales de marzo.
A sus 59 años, en su sexta campaña en el club tras llevar en el verano de 2015 y ejercer de ayudante de Tabak, Cuspinera, el 'Ché' García, Agustí Julbe o Javi Juárez, le llegaba su gran oportunidad. Y no tuvo un inicio fácil, obligado a estrenarse en el Palau, donde por poco logra que su equipo obtuviera su primera victoria en Barcelona en su historia. El Urbas Fuenla llegó tres arriba al último minuto, pero una serie de malas decisiones, una canasta rival a falta de cuatro segundos y un tiro de Novak que no entró confirmaron su ajustada derrota.
"Lo teníamos en la mano y se nos esfumó en veinte segundos", se lamentaba Raventós tras el choque. En ese momento, el Urbas Fuenlabrada se encontraba en antepenúltima posición, con un balance de 7 victorias y 20 derrotas, similar al del penúltimo clasificado, el RETAbet Bilbao Basket.
Todo empezó a cambiar frente al Monbus Obradoiro, en un guion muy similar al vivido en la Ciudad Condal, ahora con final feliz para sus intereses. Un robo culminado con 2+1 permitió una remontada milagrosa en el medio minuto final, para obtener una victoria fundamental. Mucho más que un triunfo. "Con el cambio de mentalidad, los jugadores quieren ganar y tirarse a por todos los balones y esto refuerza mucho al cuerpo técnico: todo lo que se les dice lo hacen con mucha energía".
Contagiados por esa alegría, el cuadro fuenlabreño encadenó, por primera vez en cinco meses, dos victorias seguidas. La segunda, de postín, frente a uN Hereda San Pablo Burgos acostumbrado a estar en la zona noble de la tabla. Y ni siquiera la lesión de Marc Garcia o la derrota contra el Real Madrid cortaron las alas del Urbas Fuenla.
Los de Raventós se desquitaron al siguiente derbi madrileño, contra el Movistar Estudiantes. "Tenemos mucha ilusión por ganar este partido porque implica muchas otras cosas", aseguró el técnico en la previa. Y sus pupilos se lo tomaron muy en serio, con otro final no apto para cardiacos, con un tiro libre decisivo de Novak y un fallo postrero de Barea para el 86-87 definitivo.
Por si faltara algo, este domingo el Urbas Fuenlabrada logró sumar el segundo triunfo más amplio de su historia acb, un +33 (98-65) frente a todo un Lenovo Tenerife. El quinto clasificado se vino abajo ante el hambre e ímpetu de un conjunto que, de tener similar balance que un equipo en zona de descenso, ahora suma 11 victorias. Tan grande es su brecha respecto a la penúltima plaza que podría consumar su salvación si gana este jueves en Andorra o el Movistar Estudiantes cae en su siguiente compromiso.
Cuatro victorias y dos derrotas (contra Barça y Real Madrid), el histórico debut de Bassala Bagayoko a los catorce años, el paso al frente de Ziga Samar, los puntos del incombustible Melo Trimble, máximo anotador de la Liga Endesa. Un día su escudero es Alexander, otro Emegano y al siguiente Eyenga, qué más da si el equipo funciona.
Más allá de los resultados, una imagen icónica para el proyecto Raventós, la de Trimble y sus compañeros corriendo a abrazar a los lesionados para celebrar la última de las victorias.
El EQUIPO lleva toda la temporada trabajando, sufriendo y disfrutando CONJUNTAMENTE.
— Urbas Fuenlabrada (@BFuenlabrada) May 3, 2021
Este detalle de Melo yendo a la carrera a celebrar la victoria de ayer con los lesionados describe lo que es este Urbas Fuenlabrada.#fuenlADN #TanLejosTanCerca
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"No hay nadie con mala actitud aquí: los lesionados nos apoyan y nosotros los apoyamos a ellos para intentar animarlos. La unión es una de las claves, sí", explica Eyenga para intentar descifrar las consecuencias del Efecto Raventós. De los 84,1 puntos recibidos por encuentros a los 81,16. Y de los 79,88 anotados a los 85,5. Casi nada. ¡Este Urbas Fuenlabrada está que se sale!