NCAA, Midwest Region: Louisville, en todas las quinielas

#1 Louisville Cardinals - Record: (28-5, 16-2 Big East)

Por Enrique Castellano. Los de Pitino han tenido una recta final de temporada espectacular y han conseguido ser el equipo con mejor balance en la Big East, ganar el torneo de conferencia ante una crecida Syracuse y para poner la guinda al pastel Louisville ha sido nombrado por primera vez nº1 por Associated Press’ de cara a la Locura de Marzo. Y es que los chicos de Rick están tremendamente trabajados. Son un equipo sólido en defensa, que alterna defensas individuales y zonales en toda la cancha presionantes y van a morir en cada partido. Cuentan con talento interior comandado por Samardo Samuels, un pívot freshman de 2.06 aproximadamente y que tiene un buen hacer ofensivo en el poste. Cuenta con la ayuda del inestable pero maravilloso Earl Clark que le abre espacios jugando de 4 con su tiro exterior. La batería exterior está liderada por el todo terreno Terrence Wiliams, que es capaz de anotar, tirar, pasar, rebotear y defender de forma notable, aunque es bastante paradójico su mal porcentaje en tiros libres. Luego el trío de guards formado por Edgar Sosa, Jerry Smith y Preston Knowles se encargan de apuntalar el ritmo tanto ofensivo como defensivo del equipo con su intensidad.

La estrella: Terrence Williams. Es el termómetro del equipo. Es el encargado de darle estabilidad al equipo en todo momento. No necesita tirar para hacer un buen partido y supone un par de puntos extras de intangibles que viniendo de una estrella valen el doble.

Ojo a… Earl Clark. Es el jugador de más talento de los Cardinals. A pesar de ser un jugador alto, es capaz de jugar por fuera como un exterior y recuerda bastante a jugadores como Danny Granger o Kevin Durant en ese aspecto, pero no tiene ese punto de regularidad y su cabeza le hace irse fuera de los partidos en más de una ocasión

#16 Morehead State Eagles - Record: (20-15, 12-6 Ohio Valley)

Por Agustín Romero. Morehead St ha acabado con un record de 20-15 (cuarto en su conferencia la Ohio Valley Conference con un balance de 12-6). Su estilo de juego en jugar al máximo ritmo posible debido a que no tiene jugadores más altos de 6-8 y además, sólo uno en la plantilla los mide. Intentan hacer dos contra uno en defensa pero a veces les sale mal el invento y les trae más perjuicios que beneficios. Sin embargo, son capaces de lo mejor y de lo peor y la irregularidad es su mayor defecto.

La estrella: Kenneth Faried. Uno de los mejores reboteadores del país, buenos movimientos en la pintura, a pesar de ser solo un sophomore es el auténtico líder del equipo. Ha sido nombrado jugador defensivo del año en su conferencia. Ojo a este jugador en próximos años.

Ojo a… Leon Buchanan. Principal arma ofensiva exterior de los Eagles. Ayuda mucho en el rebote.

#8 Ohio State Buckeyes - Record: (22-10, 10-8 Big Ten)

Por Alejandro González. En el campus de Columbus se ha hecho famosa la expresión “reload” (recargar). Thad Matta ve como año tras año sus grandes recruits se van a las primeras de cambio camino de la NBA. Pero el buen trabajo de reclutamiento de Matta permite traer buenos jugadores rápidamente, por lo que la reconstrucción que siempre parece necesaria al finalizar cada temporada se queda en un trabajo de recarga. Evan Turner se ha erigido en el líder del equipo, creciéndose ante la ausencia de Lighty y la “decepción” de Mullens. Con su juego todoterreno es el máximo anotador, reboteador y asistente del equipo. A su alrededor tiene buenos tiradores como Diebler, Simmons y Hill. Diebler apuntaba a crack, pero no termina de encontrar continuidad. Dallas Lauderdale, un armario empotrado escaso de técnica, suele empezar por dentro con Turner. B.J. Mullens llegaba con la vitola de pivot dominador y estrella de nivel nacional, pero ni dispone de muchos minutos ni él los sabe aprovechar. El puesto de base es el gran punto débil, quedándose el equipo sin un director claro tras no cuajar ninguno de los experimentos de Matta.

La estrella: Evan Turner. (17´1 puntos, 7 rebotes y 3´8 asistencias) Turner acaba resumiendo todos los porqués de Ohio State durante los partidos. El líder tanto en números como en mando sobre la cancha.

Ojo a... B.J. Mullens. Uno de los mejores recruits de la camada de freshmen de este año está teniendo un rendimiento muy discreto. Pero por calidad y físico descomunal tiene que acabar explotando. ¿Qué mejor momento que el Madness para hacerlo?

#9 Siena Saints - Record: Record: (26-7, 16-2 MAAC)

Por Agustín Romero. Siena ha acabado con un record de 26-7 (primero en su conferencia la Metro Atlantic Athletic con un balance de 16-2). Su estilo de juego rápido y con muchas imprecisiones es su seña de identidad. Poseen jugadores con grandes capacidades ofensivas. Sin embargo su punto flaco es la defensa, donde sufren bastante.

La estrella: Kenny Hasbrouck. Combo guard con unas manos extremadamente rápidas, sensacional en el uno contra uno, además se sabe crear sus propios tiros a pesar de ser un buen tirador de tres puntos en muchas ocasiones abusa del tiro exterior.

Ojo a… Edwin Ubiles. Es el complemento perfecto para Hasbrouck. Su capacidad atlética es tremenda pero su tiro no es muy fiable. Buen reboteador sobre todo defensivo.

#5 Utah Utes - Record: (24-9, 15-4 Mountain West)

Por Joseba Palacín. El equipo revelación de la MWC, los Runnin’ Utes, han superado las previsiones ganando el Torneo de Conferencia y liderando la RS hasta el final. Y es que viendo el plantel que dirige con fogosidad Jim Boylen uno no deja de sorprenderse de los excelentes resultados obtenidos. Recuerdan a aquella Utah que alcanzó el Sweet Sixteen con Bogut al frente, sólo que Nevill es una versión en pobre de Bogut y el resto del plantel no es mejor que aquel. La dinámica de juego, sin embargo, es similar. Absolutamente todo gira en torno a Luke Nevill. Jugadas clónicas en el libro de Boylen son el ya clásico double-team que recibe el aussie que acaba con el balón en manos de uno de los triplistas Green, Borha o Kepkay, o el 1 vs. 1 de Nevill finalizado en gancho con la zurda o diestra. A Utah se le puede hacer daño con una defensa muy física sobre Nevill que le haga sufrir, o bien dificultando su recepción del balón ya que toda la generación de juego nace desde su presencia en la cancha. Es un equipo muy pobre en cualidades atléticas, que gusta del juego a media cancha y sufre ante plantillas poderosas físicamente o ritmos frenéticos.

La estrella: Luke Nevill. Se lo ha llevado todo: POY, Defensor del año y MVP del Tnmt. Sus más de 7 pies se hacen notar cada minuto. Destaca su espectacular repertorio de ganchos y visión de juego. Es la falta de agresividad, fuerza y lentitud lo que le puede hacer no alcanzar un siguiente escalón.

Ojo a… Shaun Green. Como falso cuatro, el 6º hombre del año, es uno de los más peligrosos triplistas de la NCAA. Clave para aprovechar las ventajas que crea Nevill.

#12 Arizona Wildcats – Record: (19-13, 9-10 Pac 10)

Por Enrique Castellano. Este año los Wildcats han entrado en el March Madness a dedo. No se merecían estar aquí y únicamente han entrado por reputación. Eso no quita que Arizona tenga uno de los programas más atractivos del país para traer jugadores. Sin ir más lejos, dos talentosos jugadores como Jared Bayless (compañero de Rudy y Sergio en Pórtland) y el imberbe americano de la Lottomatica Roma Brandon Jennings en principio iban a estar en el equipo este año, pero uno prefirió hacer el one-and-done y el otro prefirió saltar el charco y empezar a ganar dinero desde ya. Esto hizo, entre otras cosas, que el legendario Lute Olson dejara el equipo a Mike Dunlap antes de tiempo. Esto no quiere decir que dejen de haber jugadores de nivel, ya que dos jugadores que presumiblemente estarán en la primera ronda del draft de este año forman parte del quinteto titular de Arizona: Jordan Hill y Chase Budinger. El primero es un espiagado ala pívot capaz de jugar de cara y de espaldas con la misma facilidad, aunque es algo irregular en el tiro. Se trata de uno de los mejores reboteadores del país. El otro es un alero blanco con buen físico y unos muelles impresionantes para los mates. Es un buen anotador aunque la cabeza le juega malas pasadas y es algo irregular. Si salimos de estos dos, empieza el desierto de Arizona donde solo sobresale el bajito base Nick Wise.

La estrella: Jordan Hill. Este cuatro aspira a top 5 del draft. Tiene unas condiciones tremendas para jugar, pero peca de tener poca experiencia. Su progresión ha sido meteórica.

Ojo a… Chris Budinger. Tiene de todo para ser un gran jugador, pero si su cabeza no le acompaña en estas eliminatorias probablemente dure poco en el torneo final.

#4 Wake Forest Demon Deacons – Record: (24-6, 11-5 ACC)

Por Alejandro González. Los Demons Deacons ganaron los primeros dieciséis partidos de la temporada en un non-conference-schedule débil, sólo con Baylor y BYU como rivales de entidad. Pero despejaron las dudas al comienzo de la temporada regular de la ACC venciendo a North Carolina y Clemson, lo que le convirtió en número uno del país, un privilegio que les duró una semana al caer ante Virginia Tech. Desde entonce han sido un equipo irregular, capaz de ganar a Duke y de perder ante North Carolina State o Georgia Tech (apeandoles éstos en cuartos de final del torneo de conferencia)

Wake Forest tiene dos caras, y es el ánimo y el equilibrio mental el que hace que muestren una u otra. Con confianza, son un equipo vistoso, ofensivo, muy versátil (Johnson y Aminu se reparten la posición de tres) y que gusta de ritmo rápido. Si no flaquean mentalmente, llegarán lejos en el torneo. Pero su debilidad mental, sobre todo fuera de casa, ha llegado a ser alarmanate. Si la gran cita de Marzo le viene grande, se pueden ir a casa pronto. Tienen un quinteto base formado por Teague-Willams (uno de los mejores matadores de la competición)- Aminu-Johnson-McFarlad, mientras que desde el banquillo salen Smith (como base director), Hale y Woods. La defensa de los Deacons no es como para incluirla en un manual y carecen de tiradores puros.

La estrella: Jeff Teague (19´1 puntos, 3´4 rebotes, 3´5 rebotes). Un anotador puro con un arsenal ofensivo completísimo que juega de base por tamaño. Uno de los mejores combo-guards del país.

Ojo a… James Johnson (14´8 puntos, 8´5 rebotes): portento atlético en el que confluyen altura y agilidad. Juega de tres-cuatro y es el que da la cara cuando el equipo flaquea.

#13 Cleveland St Vikings - Record: (24-10, 13-6 Horizon League)

Por Agustín Romero. Cleveland St ha acabado con un record de 25-10 (tercero en su conferencia la Horizon League con un balance de 12-6). Su estilo de juego se basa en el juego duro e intenso con una defensa asfixiante con un grupo de jugadores bastante jóvenes y atléticos con buenas capacidades atléticas. Han dado la sorpresa al vencer a Butler en la final de su torneo. Llegan al torneo por primera vez en 23 años y se trata de un equipo bastante joven y sin apenas experiencia en este tipo de torneos.

La estrella: J’Nathan Bullock. Otro jugador de la factoría Flint. Excelente anotador y reboteador a pesar de ser solo un 6’5. Es el líder de los Vikings.

Ojo a… Cedric Jackson. Extraordinario “ladrón” de balones además de ser un excelente pasador. Tiene buen tiro de tres puntos.

#3 Kansas Jayhawks - Record: (25-7, 14-2 Big 12)

Por Jorge M. Díez. Los hombres de Billy Self vienen de una temporada donde lograron alzarse con el título en el Madness. Con tal éxito solo Sherron Collins permaneció en el equipo de entre los que habían tenido minutos importantes. Sin embargo esto no les ha impedido tener una gran temporada en la Big 12, que han logrado ganar. Su juego tiene dos pilares fundamentales: mientras Collins es su motor ofensivo gracias a sus penetraciones y triples; Aldrich es el valladar defensivo, con su habilidad para poner tapones y centro de la zona 2-3 que utiliza Kansas. Además en ataque, Aldrich se muestra útil poniendo bloqueos a sus compañeros para favorecer sus penetraciones. Aparte de Collins y Aldrich, Tyshawn Taylor es otro de los puntales ofensivos, mientras los gemelos Morris, son una buena ayuda interior con su movilidad.
Lo mejor y lo peor de este equipo se condensa en Collins, si este está bien, es imparable incluso en los minutos calientes, pero si se obnubila y falla, lo pagan pues pierden la fluidez ofensiva necesaria.

La estrella: Sherron Collins. El pequeño base es ante todo un anotador, muy peligroso en el uno contra uno, porque es igual de eficaz penetrando, que con el lanzamiento de larga distancia. Disfruta con el balón en las manos y con la responsabilidad de cargar el equipo a la espalda. Muy atlético a pesar de su altura, puede protagonizar alguna de las mejores jugadas del Madness liderando a su equipo.

Ojo a… Cole Aldrich. Quizá Tyshawn Taylor pudiera tener sitio aquí, pero el verdadero termómetro parece Aldrich. Un jugador que tiene que trabajar aún en su juego ofensivo, pero que es fundamental en el equipo por el poder interior que aporta, tanto en el rebote, como intimidando con su físico a los rivales. De su dominio de la
zona puede pender el futuro de Kansas.

#14 North Dakota St - Record: (26-6, 16-2 Summit League)

Por Agustín Romero. North Dakota St ha acabado con un record de 26-6 (primero en su conferencia la Summit League con un balance de 16-2). Su estilo de juego con defensas individuales intensas y correosas puede causar problemas a cualquier equipo pero su limitada capacidad atlética y poca estatura juegan en su contra

La estrella: Ben Woodside. Terrible capacidad anotadora la de este base con un buen tiro exterior además de ser un excelente pasador y ladrón de balones.

Ojo a… Bret Winkelman. El más beneficiado de la capacidad de pase de Woodside. Es una máquina reboteadora y le pone mucha intensidad al juego.

#6 West Virginia Mountaineers - Record: (23-11, 10-8 Big East)

Por Jorge M. Díez. Las cosas han cambiado bajo el mando de Bob Huggins respecto a la era de Beilein, donde al contar con buenos tiradores, el tiro de 3 era su principal amenaza. Ahora el equipo se ha reorientado hacia la anotación en la zona, usando más las penetraciones, mejorando en su capacidad reboteadora y utilizando el triple solo como arma puntual. El mayor problema de West Virginia es que cuentan con un equipo descompensado, una plantilla llena de escoltas y aleros, pero sin un pívot ni un base de verdad que ayuden al equipo. Darryl Bryant (y Joe Mazzulla) son los encargados de realizar esta labor de timón, pero casi nominalmente, pues el ataque del equipo se basa en la productividad de Butler y el tirador Ruoff, principal amenaza exterior del equipo. Mientras que las labores reboteadoras e interiores son llevadas a cabo por Devin Ebanks, obligado por las circunstancias ya que entró a la NCAA siendo considerado un alero, aunque eso si, con físico para aguantar los embates de la pintura.
Pero donde se muestran efectivos es en defensa donde ningún equipo ha llegado a 80 puntos contra ellos y donde dejan a los rivales en un 27% en triples, una marca fantástica que habla de la efectividad de su línea exterior.

La estrella… Da´Sean Butler / Alex Rufo. Imposible quedarse con uno, pues comparten el peso del equipo y cualquiera de los dos puede ser quien te ejecute. El primero más predispuesto a atacar el aro (aunque con un sólido tiro exterior) y a ayudar en el rebote, mientras el segundo más tirador y ayudando a repartir juego, pero ambos son la llave del ataque de West Virginia y el objetivo a parar para los rivales.

Ojo a… Devin Ebanks. A pesar de ser un freshman, Ebanks ha sabido encontrar su rol en el equipo y se va fácil por encima de los 10 rebotes, además de asistir eficazmente y mostrarse como la tercera amenaza ofensiva del equipo. Puede ser el pegamento que de solidez al conjunto.

#11 Dayton Flyers - Record: (26-7, 11-5 Atlantic 10)

Por Jorge M. Díez. Su ritmo de juego es de tanteadores bajos, intentando minimizar las posesiones para que su falta de talento se vea suplida por el tiro correcto y la defensa al rival. Sin embargo, encuentran muchos problemas para anotar con solvencia si no pueden hundirla en el aro, siendo Chris Wright y Marcus Johnson sus jugadores más fiables en este aspecto. Además, el entrenador utiliza una rotación de hasta 12 jugadores, intentando mantener la intensidad en los suyos y tener las piernas frescas para no cometer errores. En ataque sus escoltas y aleros son los que llevan el peso anotador, mientras el base London Warren intenta organizar el juego y los pívots son utilizados para realizar el trabajo sucio. Si no defienden con solvencia, sufren al ser bastante ramplones en ataque, y son vulnerables ante las zonas pues su tiro exterior es muy mediocre. Si el partido se juega en los instantes finales desde la línea de personal también tienen muchas posibilidades de irse a casa con solo Chris Johnson por encima del 70%.

La estrella: Chris Wright. El máximo anotador y reboteador de Dayton es también sumejor jugador. Único underclassmen del equipo titular, tiene la responsabilidad siendo un alero que ataca el aro y tiene muy buena efectividad en la pintura y ayudando al rebote, pero con serios problemas para el lanzamiento de larga distancia.

Ojo a… Marcus Johnson. Al ser el segundo mejor jugador y casi único que puede tirar de 3 con efectividad, puede convertirse en la clave del Torneo para romper las defensas si estas niegan el camino al aro.

#7 Boston College Eagles - Record: (22-11, 9-7 ACC)

Por Agustín Romero.Boston College ha acabado con un record de 22-11 ( sexto en su conferencia la Atlantic Coast Conference con un balance de 9-7 ). Su estilo de juego se basa en intentar salir en transiciones rápidas tras rebote defensivo y en estático ataques a partir de la penetración ya sea doblando balones o acabando la entrada a canasta. Tienen un equipo joven que le gusta correr, pero la inexperiencia y las excesivas ganas les hacen cometer errores. Quizás sean demasiado inexpertos para llegar lejos en el torneo.

La estrella: Tyrese Rice. Combo guard anotador con buena capacidad de pentración, ha mejorado su tiro exterior esta temporada. Tiene un gran manejo de balón y un primer paso desbordante. Defensivamente es en el aspecto que deja más que desear.
Ojo a… Joe Trapani. Transferido de la Universidad de Vermont donde ya en su temporada freshman dejo detalles de su calidad. Jugador versátil donde los haya, excelente tirador de 3 puntos, es el complemento perfecto para Tyrese Rice.

#10 USC Trojans – Record: (21-12, 12-9 Pac 10)

Por Jorge M. Díez. Son un equipo que hace de la defensa al hombre su baluarte, pues cuentan con capacidades atléticas para asfixiar a sus rivales y dejarles en porcentajes de tiro irrisorios, mientras intentan anotar en transición tras capturar el rebote, aspecto donde son muy buenos esta temporada con Gibson, Washington y la línea exterior colaborando. Pero en estático también cuentan con alternativas en su quinteto titular: Hackett penetra con solvencia, Gibson aporta su movilidad, Lewis el tiro exterior y DeMar el tiro de media distancia y sus potentes mates. Sin embargo, cuentan con un equipo muy corto. Su principal punto negro se encuentra en el tiro exterior, donde son uno de los peores equipos con poco más de tres triples anotados por encuentro. Tendrán que hacer valer su defensa y su anotación dentro del arco para poder sobrevivir en un Torneo Final en el que el cansancio de sus jugadores les puede pesar al final de los partidos.

La estrella: DeMar DeRozan. Si despierta como pareció en el Torneo de la PAC 10, es el jugador llamado a liderar este equipo por calidad a pesar de ser un freshman. Cuenta para ello con un físico prodigioso al que saca partido para rebotear y jugar por encima del aro, pero también domina la suerte del tiro de media distancia, que le proporciona muchos de sus puntos. La inexistencia de su tiro de 3 es la principal lacra de su juego.

Ojo a… Daniel Hackett. El italo-americano es un base con buen físico que gusta de penetrar a canasta, pero también puede ayudar tirando desde el exterior.
Más anotador que organizador del juego, no tiembla cuando los partidos se deciden y es posible que protagonice alguna jugada o actuación épica si su equipo lo necesita.

#2 Michigan State Spartans - Record: (26-6, 15-3 Big Ten)

Por Enrique Castellano. Y Tom Izzo lo volvió a hacer. Los Spartans han completado una sobria temporada y siguen rectos a su camino hacia la Final Four que se juega en casa, Detroit (Michigan). Cuenta con una plantilla que no derroche talento por los cuatro costados y tenemos que conformarnos con las pinceladas del a veces mágico Kalin Lucas y los destellos del prometedor freshman Delvon Roe. Eso no significa que el equipo de Coah Izzo sea malo. Haciendo honor al sobrenombre de espartanos, vemos un equipo muy conjuntado, que pelea hasta la última bola y lucha hasta el último segundo. Juegan posesiones largas, casi agotando los 35 segundos de posesión hasta encontrar la mejor opción. Eso no quiere decir que renuncien al contraataque, ya que es la mejor virtud de su estrella, pero no lo ejecutan si no es una opción realmente clara. Quizás el mayor problema de Michigan State sea la falta de experiencia de sus jugadores y que les falta un punto de altura, potencia física, pese a ser bastante atléticos.

La estrella: Kalin Lucas. El diminuto base ha sido nombrado recientemente mejor jugador de la Big Ten. Es el que más fácil ve aro en su equipo y es algo fundamental en un equipo que juega a pocos puntos.

Ojo a… Goran Suton: El senior probablemente sea el más espartano del equipo. Es un poste alto, luchador y bregador. Con el tiempo ha desarrollado un tiro de media-larga distancia interesante. Muchas de las aspiraciones de su equipo pasan por él.

#15 Robert Morris Colonials – Record: (24-10, 15-3 Northeastern Conference)

Por Agustín Romero. Robert Morris ha acabado con un record de 24-10 ( primero en su conferencia la Northeastern Conference con un balance de 15-3 ). Su estilo de juego está basado en su poderoso rebote defensivo y ofensivo y en las transiciones rápidas. A pesar de no tener gente de más de 6’8 fisicamente son fuertes e imponentes.

La estrella: Jeremy Chapell. Pedazo de anotador. Tira, penetra, rebotea, asiste, tapona, recupera balones, “Mr All “. Jugador del Año en su conferencia.

Ojo a... Rob Robinson. Si Chapell era la referencia exterior, Robinson es la interior, se mueve bien en la pintura y rebotea a las mil maravillas.